BUENOS AIRES, Argentina (EFE). Los mexicanos de Café Tacuba han regresado "a la energía del primer disco" con Cuatro caminos, el álbum que van a presentar en Buenos Aires el próximo fin de semana.
Emmanuel del Real, los hermanos Quique y Joselo Rangel, y Rubén Albarrán, ahora rebautizado Elfego Buendía, actuarán en el enorme estadio de River Plate, con capacidad para 60 mil espectadores hoy viernes, y el domingo volverán a subirse a un escenario, en esta ocasión para un concierto "más íntimo" en una sala teatral.
En el "Monumental", donde junto a las nuevas canciones no faltarán éxitos de anteriores discos como La ingrata y Flecha , les acompañará las bandas locales Babasónicos y El Otro yo.
"Después de haber llegado a un nivel de sofisticación y abstracción con Revés/Yo soy (1999) y el año sabático que nos tomamos, se dio la necesidad de generar algo más inmediato", dijo el guitarrista Joselo en una entrevista con el grupo.
Cuatro caminos , que está producido por Gustavo Santaolalla y Aníbal Kerpel, un dúo clásico para Café Tacuba, más Dave Fridman y Andrew Weiss, marca un golpe de timón en la carrera de la banda que renovó el rock latino en la década de los años 90.
El disco, el primero del grupo después del año de descanso, consta de 14 canciones con un aire de frescura adolescente, según dicen los críticos, y un sonido más cercano al rock tradicional.
Sin embargo, la principal novedad es la presencia de la batería en lugar de la caja de ritmos que era una de las características del sonido Tacuba, y la ausencia de referencias folclóricas mexicanas.
"Para nosotros tener un baterista es algo experimental y una nueva herramienta para el grupo", dijo Quique a La Nación en referencia a Luis Ledezma, "el nuevo" en la banda.
Muchas de las letras de Cuatro caminos muestran una referencia existencial, lo cual, según explica Rubén, tiene que ver con la percepción de vivir en un mundo interconectado, en el que todo cambia rápidamente.