La globalización ha transformado las relaciones sociales en Centroamérica. El ámbito de las relaciones laborales y el movimiento sindical no quedaron al margen de ese proceso de cambios.
Sin embargo, por lo menos en el caso de Panamá, no se conoce científicamente cuáles han sido sus implicaciones en las relaciones laborales, aun cuando desde finales de la década de 1970 se inició, primero, el largo proceso de apertura económica y de mercados; segundo, las distintas acciones para garantizar la estabilidad de los precios y los costos de producción; y tercero, una serie de reformas laborales de hecho y en derecho para adecuar las relaciones laborales a las necesidades económicas de las empresas y el poder de dirección.
Es decir, todavía no se conoce a ciencia cierta cuál fue el impacto de la apertura económica y con ello de la globalización en los sindicatos panameños; ¿cómo negocian, mediatizan o cambian los sindicatos las políticas de apertura económica que afectan las relaciones laborales?; ¿qué tipo de sindicalismo emerge con la apertura económica?; ¿cuáles son sus demandas, aspiraciones y perspectivas del sindicalismo panameño en el marco de las políticas de apertura económica?; ¿afecta de igual manera la globalización a los sindicatos y las relaciones laborales en Panamá?, ¿reaccionan, negocian, inciden o participan de igual manera los sindicatos panameños ante y en la transformación del sistema de relaciones laborales vía la apertura económica?; ¿elaboran, preparan o diseñan los sindicatos panameños estrategias para enfrentar la transformación del movimiento sindical y el sistema de relaciones laborales ante la globalización?; ¿qué tipo de reformas laborales y económicas se realizaron para garantizar la inserción periférica de la economía panameña en los proceso de globalización regional?
En el momento actual, no cabe duda, existe la necesidad de analizar sociológicamente la relación que existe entre la globalización y la emergente realidad laboral y sindical, para conocer si en realidad la globalización y el libre mercado ha generado contemporáneamente, nuevas formas de discriminación laboral o exclusión social, que afectan especialmente a los trabajadores o por el contrario, se trata de una serie de políticas laborales impulsadas necesariamente por el Estado, pero sin una regulación adecuada y acorde con los acuerdos internacionales en materia laboral que requiere ser modificada y ajustada al proceso de transformaciones que se vive a nivel regional.