Botellas de plástico, una sandalia, un vestido o una jabonera entre los fragmentos de conchas que forman la arena de la playa de Veracruz distan mucho de ser adornos.
Estos fueron algunos de los objetos que se veían en este sitio turístico del distrito de Arraiján, ayer antes de las 8:00 a.m.
Pero la cara del lugar fue cambiando poco a poco mientras que voluntarios de la Autoridad Marítima de Panamá, Fundación Mar Viva, la Cámara Marítima de Panamá y del Municipio de Arraiján recogían desechos orgánicos y no orgánicos.
“Estamos haciendo una limpieza simultánea en Puerto Armuelles (Chiriquí), y tenemos planes para hacer lo mismo en Azuero y Colón, en una fecha que será anunciada más adelante”, informó Rogelio Barsallo Fábrega, director general de Puertos e Industrias Marítimas Auxiliares.
A las 10:00 a.m. había unos 30 voluntarios, que se dividieron en grupos para limpiar las áreas desde el puente de Veracruz hasta el final de la costa.
“Lo que se busca básicamente es crear conciencia en los panameños, pues este es un tema de salud”, comentó Valerio Ábrego Jiménez, director de Relaciones Públicas de la AMP.
Roberto Rey, de Ingeniería Ecológica de Panamá, fue uno de los encargados de explicar a los voluntarios cómo separar los desechos para que luego puedan ser reciclados.
La basura fue clasificada en orgánica, plásticos, aluminio y vidrio. Los plásticos fueron clasificados en PET y en reciclables en general. Estos últimos incluyen HDPE (poliestireno de alta densidad), LDPE (poliestireno de baja densidad) y PVC (cloruro de polivinilo).
“El problema de reciclar en esta la playa es que los materiales ya están intemperizados y ya no tienen valor comercial, a excepción de los plásticos”, explicó Rey.
Considera que el impacto de este tipo de actividades no es “muy significativo”, pero “por algo se empieza”.
“Se requiere de mucho esfuerzo para cambiar la mentalidad de las personas”, opina, y coloca como ejemplo el distrito de Boquete, que, según él, está a la cabeza de la disposición de desechos sólidos.
Sebastiana Torres, voluntaria del Municipio, opinó que “estas actividades son buenas, pero la gente que viene a la playa debe recoger su basura y depositarla en lugares adecuados”.
