Este es el sentido de pertenencia que debemos tener todos los panameños, porque, efectivamente, somos propietarios de la institución, de manera que nos sentimos con el derecho de hacer sugerencias. Los directores, quizás un poco para mitigar la carga que representa los problemas del Seguro Social, nos dicen que todos debemos participar en la solución de los problemas.
Lo anterior pareciera que tiene un sentido romántico, porque cuando hacemos aportes, no sabemos lo que ocurre, si es que el director los descarta o que en el camino se queda la respuesta, porque he tenido la experiencia de conversar con directores y me han confesado: no puede ser, recibí la propuesta y la envié a tal dirección.
Como profesionales, coincidimos en algunos espacios con directivos del sector salud y les comentaba que los servicios de salud se centran en el hombre sano y que estaba trabajando en una propuesta para involucrar a todos los actores que están vinculados a mantener al hombre sano. Le pareció una idea excelente y me motivó a que culminar la tarea, lo cual, efectivamente, hice. Ese proyecto se lo envié, tanto al ministro de Salud, como al director de la Caja de Seguro Social, con la idea de que convocáramos a todos los actores, pero la respuesta nunca llegó.
Soy autor del libro “Sabes cuándo debes Pensionarte?”, que está acompañado de un CD con las tablas financieras para que el lector pueda hacer sus cálculos de la pensión. Este libro fue prologado por el profesor Juan Jované, a quien todos reconocemos como un excelente economista, que concluye diciendo: “su lectura no es sólo recomendable, sino obligatoria”. Con el propósito de poder presentar el libro, le llevé una copia al director de Relaciones Públicas de la CSS y jamás me dio respuesta.
He planteado en algunos foros y en escritos que el problema del Seguro Social es gerencial, y que mientras no se resuelvan los problemas que tienen, serán recurrentes, de manera que si aportamos recursos adicionales para resolver la crisis actual, estos volverán a aflorar, porque hay que cambiar los valores culturales de la organización.
Valdría la pena que la Caja de Seguro Social invierta en una consultoría para definir un nuevo modelo de gestión, con profesionales que no estén contaminados con la problemática de la institución, que pueda generar un modelo basado en resultados para romper con la resistencia a los cambios de los colaboradores que no están dispuestos a abandonar su área de confort o que esconden su mediocridad haciendo las cosas siempre de la misma forma.
Estamos seguros de que esta consultoría racionalizaría los recursos de la institución, haría que todos se comprometan con resultados y que podamos identificar en la cadena de procesos quieén no cumplen con su responsabilidad. Tendríamos mayores posibilidades de usar el entorno virtual para prestar servicios a los usuarios y, por supuesto, hacer una institución eficiente.
El autor es especialista en Administración de Servicios de Salud