Es una estrategia de educación informal, permanente, para: extender, transferir o enseñar a los agricultores y a su familia métodos y tecnologías modernas de producción agropecuaria, amigables con la conservación del medio ambiente. Para que su actividad sea eficiente, con altos niveles de productividad( costos vs beneficios) y competitivad.
El investigador genera o valida las tecnologías, en el Instituto de Investigaciones Agropecuarias de Panamá, la Autoridad de Recursos Acuáticos de Panamá, la Universidad de Panamá , así como en otras universidades y empresas privadas. El extencionista se la enseña o transfiere al hombre del campo y a su familia, como un servicio del Estado.
Este servicio es de doble vía y permanente: el extensionista o técnico del Mida, lleva conocimientos y recoge información sobre: plagas, enfermedades, información estadísticas, fenómenos naturales, atmosféricos y otras anomalías, las reporta a sus superiores y estos toman las acciones correctivas. El servicio incluye el establecimiento de parcelas agrícolas y unidades de producción pecuaria demostrativas, como parte del proceso enseñanza aprendizaje. Las ferias agropecuarias son eventos de extensión agrícola para mostrar logros y/o resultados.
Estados Unidos estableció el servicio de extensión agrícola hace más de 200 años basado en lo que existía en Europa. Actualmente ese servicio existe bajo la responsabilidad del USDA( Departamento de Agricultura). En la década de 1950, inició en nuestro país este servicio y la misión de la Universidad de Arkansas , se estableció el recién creado : Instituto Nacional de Agricultura en Divisa. Reforzó las funciones del servicio de extensión agrícola, como la actividad principal de Ministerio de Agricultura, Comercio e Industrias, hasta inicios de la década de 1970, cuando la actividad principal de este se enfocó en la producción colectiva por las organizaciones campesinas como: los asentamientos campesinos y las juntas agrarias y el servicio de extensión prácticamente fue abolido y el agricultor y ganadero individual era solo atendido para el control y erradicación de las zoonosis: brucelosis y tuberculosis. En diferentes gobiernos se han hecho intentos en restablecerlo, herramienta fundamental para tecnificar nuestro agro pero el hecho que en siete gobiernos pos-invasión( 30 años) hayan existidos 17 ministros del Mida, han impedido la existencia de políticas de Estados para el sector primario de nuestra economía. Como resultado la migración del campo a las áreas adyacentes del Canal.
Abrigamos la esperanza que el actual Gobierno que ha dado muestras fehacientes de estar dispuestos a resolver la problemática del agro nacional; fortalezca la Dirección de Extensión Agropecuaria del MIDA presupuestariamente, de tal forma que sus técnicos vayan al campo y áreas comarcales en una cruzada nacional para producir con más eficiencia y productividad que redundará en mayor competividad para ofrecer agroalimentos de mejor calidad y precios al gran consumidor nacional y exportar los excedentes.
El autor es veterinario, exministro del Mida y ex legislador de la República.