La enfermedad causada por SARs-CoV-2 se contagia principalmente por transmisión aérea. Esto resalta la gran importancia de mantener el uso correcto de mascarillas y pantallas faciales, y buenos hábitos de higiene, como el lavado de manos, en nuestra vida diaria.
Lastimosamente, las decisiones políticas y la evidencia científica se mueven a velocidades distintas, lo cual crea una inercia burocrática en la comunicación de riesgo. En este caso, no se ha resaltado adecuadamente a la ciudadanía la importancia de la transmisión aérea del virus.
Existen “Tres C” que debemos evitar para la prevención del virus: espacios Cerrados, lugares Concurridos y contactos Cercanos. Sin embargo, el que seamos uno de los países más felices del mundo y el mayor consumidor de cerveza per cápita en Latinoamérica, puede estar afectando la lucha contra la Covid-19. Contra lo recomendado por especialistas y organismos internacionales, se mantiene la cultura de celebraciones con numerosos familiares y fiestas clandestinas en las que la cercanía a otras personas, riéndonos y hablando con voz elevada, facilitan la transmisión del virus.
Aun las indicaciones de quedarnos en casa pueden ser contraproducentes, sobre todo en lugares de alto hacinamiento y con poca ventilación. Cerca del 50% de las personas infectadas son asintomáticas, y podemos convivir con ellos sin saberlo. Una buena ventilación, con ventanas y puertas abiertas, acompañadas de abanicos apuntando hacia afuera, pueden disminuir la presencia de gotículas de saliva en el aire en cuestión de segundos. Estudios en Singapur y Estados Unidos determinaron que ciertas acciones automáticas, como quitarnos la ropa y sacudirla al venir de lugares de alto riesgo, o halar la cadena del inodoro pueden causar que el virus se aerosolice y nos infecte. En China se determinó que el transporte público de todo tipo puede ser un factor de propagación eficiente del virus.
Así, la nueva evidencia científica recomienda utilizar la mascarilla de nariz a barbilla, y caretas faciales en lugares cerrados, como el transporte público; facilitar la ventilación, tanto como sea posible, incluyendo taxis y transportes privados; estar en lugares abiertos y evitar lugares con muchas personas; y mantener el lavado de manos y distanciamiento físico en todo lugar público. Es recomendable promover actividades y ejercicios al aire libre, como en parques. Quienes deciden y aplican políticas cuentan con esta nueva evidencia para apoyar su labor.
La autora es doctora en Salud Pública. Ciencia en Panamá, Todo Panamá, Transparencia Internacional
Esta nota se modificó a las 10:05 a.m. del 9 de enero de 2021. En su versión original se informó que el 17% de las personas infectadas son asintomáticas; la cifra correcta es 50%...
