No hay nada más riesgoso que procurar predecir la política con tres años de anticipación, pero me “echo a la candelada”, sabiendo que es poco probable acertar.
Arranco con un contexto en el que la mayoría de los votantes están frustrados con toda la “clase política”, que parece estar toda desconectada de las necesidades y deseos de la ciudadanía. El gobierno no parece entender su realidad y no ofrece la menor dirección o liderazgo, dando una sensación de que el país está “al garete”, sin piloto idóneo: un tremendo vacío. La mayor oposición al gobierno proviene de importantes facciones de su propio partido.
Así las cosas, examinemos los conocidos partidos y liderazgos, en orden de su tamaño por miembros inscritos, sabiendo que inscritos no se traduce necesariamente en votos
El PRD: para comenzar, en un país con tradición saludable de no repetir, el partido en gobierno – el PRD –, automáticamente queda en la cola de posibilidades. Adicional a eso, está haciendo una pésima y corruptísima gestión de gobierno. Ésto, y un fraccionamiento interno, refuerza esa posición.
Adiciónesele el intento presidencial de poner a su ministro más cuestionado e impopular de candidato… Primero, a la secretaría general de su partido y luego, de candidato presidencial. Pone al PRD casi que con cero posibilidades, a menos de que produzca una candidatura vieja pero renovadora, como una de Ernesto Pérez Balladares (ya resolvió la visa de ingreso a Estados Unios; le falta la demanda de secuestro a La Prensa) o de algún respetado miembro de su círculo, como el doctor Francisco Sánchez Cárdenas. Ésto le abriría posibilidades, pero aún sería una carrera cuesta arriba.
El CD, con Rómulo Roux de candidato, siempre que pueda superar la batalla interna que le han montado los martinellistas a través de Yanibel Äbrego. Roux es un candidato presentable –aunque pesa negativamente que siempre miró para otro lado cuando Martinelli se robaba el país–, pero además necesita un aliado con tradición. El más probable parece ser José Blandón, del Panameñista (quien en la vuelta pasada hizo buena candidatura, pero no pudo superar el peso de ser partido de gobierno… y salió muy mal, por debajo de Roux). Ya estos dos anunciaron que irán juntos en la búsqueda de firmas para la constituyente, lo que podría ser el primer indicativo de su posible alianza para el ’24.
El RM – propiedad de Martinelli-, mis informes, igual a los recientes anunciados por el Toro, son de que Martinelli, así como sus hijos -buscado por la ley en varios países-, no podrá ser candidato, así es que por más votos que pueda comprar, no entra en mi ecuación.
Alianza. Partido en el fondo religioso, espera contar con todos los votos de la iglesia de su nacimiento, y otra vez se equivocará. Ser miembro de una iglesia y querer a sus dirigentes gobernando son cosas muy distintas, como se ha comprobado históricamente una y mil veces.
Otro Camino Panamá. Ricardo Lombana ya pronto completará la inscripción formal de su partido político. En la vuelta pasada –como independiente–, con todas las reglas electorales en contra, libró una batalla electoral muy exitosa, mostrando buenas posibilidades futuras. Es la única cara fresca y respetable en el panorama. Tiene muchos obstáculos que superar, pero definitivamente está en la carrera debido al destrampe interno de los partidos tradicionales y el nivel de frustración de los votantes hacia candidatos con caras conocidas.
La izquierda extrema -Suntracs, Frenadeso, etcétera-, creo se volverán a inscribir . Es posible que luego de dos mega fracasos decidan buscarse un candidato más potable (ejemplo, Morales) y moderen su mensaje, como lo hizo Lula en Brasil, que luego de múltiples fracasos moderó el suyo, al punto que ganó e hizo un buen gobierno, aunque ahora sabemos, plagado de corrupción. Tienen que superar el hecho de que ningún panameño quiere ver a su país convertido en Venezuela (de país más rico en América Latina a uno con el salario mínimo de centavos y todo destruido para todos, excepto para la cúpula criminal).
Así las cosas, veo unas elecciones en el ’24 con candidatos así, de atrás para adelante:
- Izquierda extrema: Morales.
- CD /Panameñista: Roux-Blandón.
- Otro Camino: Lombana.
- PRD: Pérez Balladares o Sánchez Cárdenas.
Mi predicción: la carrera será entre Lombana y Roux.
Ahora le toca a mis amables lectores hacer su proyección y, probablemente, equivocarse igual que yo.
El autor es fundador del diario La Prensa
