Era 2004, cuando un representante de la firma dominicana Pellerano & Herrera contactó a las oficinas de Mossack Fonseca (MF) en Panamá, a fin de adquirir una sociedad anónima añeja, constituida en esta jurisdicción, cuyo año de inscripción fue 2002.
Fue así como Mossack Fonseca vendió la sociedad Lashan Corp. a su cliente intermediario, y poco después, los requerimientos relacionados con ella comenzaron a llegar.
Tan solo unas semanas después solicitaron a MF que les proporcionara el servicio de accionistas y directores nominativos.
Y los abogados panameños hicieron una interesante propuesta para estructurar la figura del accionista nominativo.
Recomendaron que se utilizara una fundación de interés privado y que, a su vez, se nombrara un “protector” que no sería el real beneficiario final, sino de quien recibirían las instrucciones.
“Bajo esta estructura que proponemos para el nombramiento de accionistas nominales, nosotros recibimos instrucciones de parte del protector, persona que no es el real beneficiario final, sino nuestro cliente directo [...] el protector tiene comunicación directa y relación continua con los reales beneficiarios y nuestro trabajo consiste solo en actuar bajo las instrucciones precisas del protector”, recomendó Mossack Fonseca a su cliente a través de un correo electrónico. Para este esquema, recomendó usar la fundación Beneficence Foundation, cuyo primer beneficiario sería World Wildlife Fund. (ver https://www.worldwildlife.org).
Sin embargo, el beneficiario final de Lashan Corp., Ángel Rondón, habría optado inicialmente por usar, “como en otras ocasiones”–dijeron sus abogados dominicanos– un fideicomiso privado, lo que nunca se materializó. Con el pasar de los años, la relación de Mossack Fonseca con Ángel Rondón se fue haciendo más directa y en ocasiones él mismo se comunicaba con la firma panameña y no a través de sus abogados en Dominicana. De hecho, en un intercambio extenso de correos electrónicos se consideró que MF tratara directamente a Rondón como cliente y no a través de un intermediario. Por varios años, los directores de Lashan Corp. fueron empleados de MF, hasta que en 2014 se cambió la junta directiva y fueron nombrados Rondón como presidente, Zunilda Marte de Rondón como tesorera y Angelina Rondón Marte como secretaria.
De igual forma, Rondón solicitó a Mossack Fonseca gestionar documentación para abrir cuentas bancarias en varias instituciones, entre ellas, el BSI Overseas (Bahamas) Limited, el Banco Continental en Panamá y el AOB Antigua Overseas Bank Ltd., en el cual trabajó Vinicius Veiga Borin antes de laborar en el Meinl Bank de Antigua, institución que fue comprada por Odebrecht.
Ante los requerimientos bancarios, Lashan Corp. tuvo que emitir nuevos certificados de acciones, esta vez a favor de Ángel y Angelina Rondón y Zunilda de Rondón.