Una baja participación marcaba ayer las primarias en Chile para elegir a parte de los candidatos a las presidenciales de noviembre, pese a llamados de último momento a sufragar, en un país cuya atención estaba puesta en el partido de su selección de fútbol por la final de la Copa Confederaciones.
En los comicios en que debutó el voto de los chilenos en el exterior, la alianza de partidos conservadores Chile Vamos y el bloque de izquierda no oficialista Frente Amplio intentaban medir su capacidad de convocatoria, ante la apatía de la ciudadanía por el desprestigio de la clase política.
El expresidente conservador Sebastián Piñera, favorito para ganar los comicios en Chile Vamos, hizo un llamado a participar en las primarias, en medio de críticas hacia el gobierno de la socialista Michelle Bachelet por la escasa promoción de estos comicios en que el voto es voluntario desde la pasada elección.
“Es muy importante que la voz de la gente se escuche fuerte y clara, y hoy es una gran oportunidad para que los chilenos se expresen”, dijo Piñera a la salida del local de votación.
En la coalición Chile Vamos también participan el diputado Felipe Kast y el senador Manuel José Ossandón, quienes han tenido un apoyo mayor al esperado en los primeros escrutinios de algunas mesas en el extranjero.
La periodista Beatriz Sánchez, quien irrumpió en los últimos meses en las encuestas con un discurso de izquierda marcado por la desigualdad del país, figuraba hasta antes de las primarias por encima de su contendor, el sociólogo Alberto Mayol.
Tanto Sánchez como Mayol habían apostado a una fuerte presencia de jóvenes en los locales de votación, pero medios locales destacaron que en muchos recintos había más prensa y funcionarios militares custodiando que gente sufragando.
“Todavía hay mucho tiempo para votar, para ver el partido, para hacer un asado y con alegría se pueden hacer las tres cosas”, dijo Sánchez tras votar.
