El contralor Federico Humbert confirmó que remitió al Ministerio Público el resultado de una auditoría efectuada a los bienes de Alma Cortés, quien fungió como ministra de Trabajo y Desarrollo Laboral durante el gobierno de Ricardo Martinelli (2009-2014).
El pasado lunes 13 de junio, un día antes del anuncio de Humbert, Cortés se refirió al tema. Aseguró que el Ministerio Público no le ha permitido tener acceso al documento.
Mientras que Humbert dejó claro que en todas las auditorías que hace la Contraloría se le da la oportunidad a los exfuncionarios para que realicen sus descargos. Incluso, contó que Cortés estuvo en la Contraloría por este tema, pero optó por no hacer sus descargos. “Razón por la cual nosotros enviamos el informe solamente con la información que habíamos recabado”, sostuvo.
Humbert manifestó que la Contraloría realiza las auditorías y las remite a las entidades correspondientes; en esta ocasión, al Ministerio Público y al Tribunal de Cuentas. “En este caso, se envió ya al Ministerio Público y a este le corresponderá llevar adelante un proceso y, una vez más, darle la oportunidad a la exministra para que diga su historia y presente descargos sobre lo que la Contraloría pudo haber encontrado o no”, explicó.
ABULTADO PATRIMONIO
De acuerdo con información publicada por La Estrella de Panamá, que cita la auditoría de la Contraloría, Cortés no podría justificar $2.5 millones.
Según el informe, la exministra posee ingresos de fuentes conocidas por un millón 22 mil 418 dólares. Allí se agrupan su salario de ministra, viáticos, intereses ganados, la venta de una casa en Castilla de Oro, un préstamo bancario, así como otros ingresos y saldos bancarios.
Mientras que los recursos adquiridos suman $3 millones 610 mil 348. Con ese dinero, la exministra habría adquirido un carro Kia hatch back, una casa en el PH Royal Country (cuyo valor supera los $350 mil), otra en el PH Fontanella del Mar (de alrededor de un cuarto de millón de dólares), otro dos apartamentos en el PH Las Rokas, 22-D y 23-D por unos 300 mil dólares. A ello se le suman otros gastos.
Una operación matemática simple permite determinar que Cortés, a quien el expresidente Ricardo Martinelli designó como presidenta del partido Cambio Democrático, no puede justificar $2.5 millones.
Este medio intentó obtener ayer la versión de Cortés después de que el contralor declaró, pero no respondió las llamadas. El que sí lo hizo fue su abogado, Alejandro Pérez, quien coincidió con la exfuncionaria en que no han tenido acceso al expediente. Dijo, además, que presentaron los respectivos poderes y una advertencia de inconstitucionalidad, alegando que el decreto en el que se funda el informe de la Contraloría es, a su juicio, “inconstitucional”.
Argumentó que Humbert no está facultado para hacer las investigaciones por enriquecimiento injustificado.
Pérez explicó que algunas de las casas de su cliente fueron adquiridas mediante financiamientos bancarios, y añadió que en la investigación incorporaron ingresos de otros abogados.
“Una cosa es el patrimonio de la sociedad anónima y otra el patrimonio personal”, indicó.
SE ESCONDE
A raíz de que no respondía las llamadas, este medio ubicó a Cortés en la Asamblea Nacional, donde ayer se reunió con miembros de la bancada de su partido, Cambio Democrático (CD). La cita culminó a eso de las 7:00 p.m. Primero salieron todos los diputados, minutos después salió la ex primera dama Marta Linares de Martinelli, sin embargo, Cortés no abandonaba el salón donde se realizó el encuentro.
Un rato después, la exfuncionaria se disponía a abandonar el lugar en compañía de al menos cinco asistentes, los que en todo momento trataron de impedir que La Prensa se acercara a Cortés. Incluso, una de las personas que le acompañaba agarró la mano del periodista con la que sostenía la grabadora; paralelamente, el abogado y asesor de CD Hugo Polo bloqueaba la salida.
Entre forcejeos, gritos y empujones, este medio le consultó a la exministra por el alcance de la auditoría, pero Cortés desatendió la pregunta. En cambio, se fue por una puerta trasera. Una camioneta tipo 4x4 la esperaba.
Por segunda ocasión, los diputados de la bancada de Cambio Democrático (CD) no pudieron escoger al candidato de este colectivo para la presidencia de la Asamblea Nacional por falta de cuórum.
En esta oportunidad, a pesar de que acudieron al encuentro la presidenta encargada del partido, Alma Cortés, y Marta Linares de Martinelli, esposa del presidente del partido, Ricardo Martinelli, la falta de cuórum impidió que la bancada realizara la votación del candidato propio que presentará el próximo 1 de julio.
A la reunión solo acudieron 10 de los 25 diputados: Dana Castañeda, Héctor Aparicio, Carlos Afú, Edwin Zúñiga, Rubén Frías, Aristides De Icaza, Fernando Carrillo; Víctor Lee, suplente del diputado Héctor Carrasquilla; Agustín Shellhorn, suplente de Marylín Vallarino; y José Luis García, suplente de Vidal García.
Tras reunirse por más de dos horas, la jefa de la bancada de Cambio Democrático, Dana Castañeda, manifestó que solo se discutió un informe que presentó Cortés sobre temas varios, entre ellos, la alerta sanitaria por el virus A(H1N1) y lo relacionado con la escogencia de la nueva directiva del Órgano Legislativo.
“Es una agenda con diversos temas, y nosotros vamos a continuar la reunión el próximo lunes, vamos a seguir invitando a los diputados para que se sumen a esta reunión para que podamos entre todos analizar la agenda legislativa. Yo creo que, como partido de oposición, nos corresponde atender los problemas que verdaderamente afectan a la población panameña”, dijo la diputada Castañeda.







