Mientras que el presidente de la República, Laurentino Cortizo, afirmó ayer que mantiene un equipo que analiza los mensajes de Whatsapp filtrados del teléfeno del expresidente Juan Carlos Varela, el Ministerio Público aún no ha confirmado si abrirá una investigación de oficio para analizar la veracidad de estas informaciones y su procedencia.
Ayer, en una conversación con varios medios de comunicación, Cortizo fue enfático en que “no vamos a estar pinchando a nadie de manera ilegal. Sí hay pinchazos judicializados, pero no desde el punto de vista de qué dice una persona u otra. Nosotros no perdemos tiempo en eso y además no lo permito”.
Cortizo también fue cuestionado sobre una posible solicitud de renuncia de la procuradora Kenia Porcell, debido a que los correos difundidos demuestran una gran cercanía al expresidente Varela, a lo que en primer momento respondió que la renuncia es un tema muy personal, pero estimó “que es un tema que tengo que analizar”.
En una entrevista concedida el pasado jueves a Telemetro Canal 13, Varela apuntó a su antecesor Ricardo Martinelli como presunto responsable de las filtraciones y aseguró que “la procuradora enfrentó a una organización criminal que, sin duda, sigue impune, liderada por el expresidente”.
“Tenía la responsabilidad de hacerle un acompañamiento [a la procuradora], de coordinación... Ese nivel de comunicación lo manda la Constitución... Hubo un respaldo, siempre respetando la independencia del Ministerio Público”, agregó Varela.
Tanto el pasado jueves como ayer, viernes, se le solicitó al Ministerio Público una reacción sobre la divulgación de los correos, luego que Varela reconociera que sus comunicaciones se habían divulgado y -en algunos casos- alterado sin su autorización, pero se informó que no había comentarios.
En los documentos filtrados se recogen conversaciones con Porcell en las que se maneja información detallada de casos de alto perfil radicados en el Ministerio Público, entre los que se encuentra la trama por el pago de sobornos de Odebrecht.
También se menciona una supuesta ayuda que pidió la procuradora para la aprobación de un préstamo hipotecario a su hermana, en el Banco Nacional de Panamá.
‘Campaña de desprestigio’
Porcell ha guardado silencio, más allá de un comunicado de la Procuraduría que niega su supuesta renuncia, ante una carta falsa que circuló ayer con el membrete de la entidad. Se trata, según el comunicado, de una “campaña de desprestigio en contra” de Porcell.
Porcell fue designada en el cargo por un período de 10 años, que vencen el 31 de diciembre de 2024.
Varela, que está en China, tampoco han confirmado si acudirá al Ministerio Público para presentar una denuncia por los delitos contra la inviolabilidad del secreto y el derecho a la intimidad.