La falta de recursos económicos compromete la apertura de la extensión universitaria de la Universidad de Panamá (UP) en el distrito de Arraiján, provincia de Panamá Oeste.
En efecto, a pesar de que las autoridades tienen previsto habilitar las instalaciones para el año lectivo 2019 con la apertura de tres licenciaturas, el proceso está detenido por la falta de presupuesto para equipar la nueva sede.
En este contexto, el rector de la UP, Eduardo Flores, envió el pasado 5 de septiembre una nota al presidente de la República, Juan Carlos Varela, en la que le reiteró la solicitud para que los fondos necesarios sean traspasados a la UP.
En la misiva, Flores planteó lo siguiente: “Nos preocupa en gran medida que, aun cuando nos encontramos en las fases finales para ocupar las instalaciones y entrar en funcionamiento, no contamos con el equipamiento de estas instalaciones”.
Añadió que “solicitamos al señor presidente que nos apruebe y autorice el suministro del equipamiento que se requiere para poder atender a la población estudiantil de la provincia de Panamá Oeste”.
Las necesidades
Cenén Aguilar García, director de la extensión universitaria de Arraiján, precisó que en total se requieren unos 800 mil dólares para equipar 18 aulas y 2 auditorios.
Algunos de los implementos que se necesitan son: 720 sillas, 18 tableros digitales, 24 acondicionadores de aire, 200 computadoras, 18 sillas y pupitres, 5 copiadoras, 8 impresoras, sillas y escritorios de oficina, cableado para red de servicios de interconexión, entre otros.
Aguilar García manifestó que aunque la universidad está dispuesta a iniciar las clases el próximo año, se ven limitados en la parte presupuestaria y frente a esa realidad han sido cuidadosos de no abrir aún el periodo de matrícula.
No obstante, subrayó que como parte del proceso de organización se acordó que las tres primeras carreras que se habilitarán en el espacios serán las licenciaturas en Contabilidad y Auditoría, Informática para la Gestión Empresarial y Pública, así como la de Inglés.
El director regional de la extensión universitaria de Arraiján insistió en la necesidad urgente de poner en funcionamiento este espacio, toda vez que actualmente los estudiantes de esa provincia están obligados a asistir a la sede regional que está en el distrito de La Chorrera o trasladarse a la provincia de Panamá.
Además de eso, el crecimiento poblacional de esta zona del país demanda la apertura no solo de centros de enseñanza de todos los niveles, sino también de servicios sanitarios, facilidades de transporte, atender la demanda de trabajadores de la empresas que se están estableciendo en la región, etc.
Solo en el corregimiento de Arraiján hay 300 mil habitantes, según las últimas estimaciones de la Contraloría General de la República.
Otros detalles
El nombramiento y ubicación del personal administrativo es otro desafío que enfrenta esta extensión universitaria para que su apertura sea una realidad, indicó Keyla Escala, secretaria administrativa de centro.
Adelantó que el personal requerido es de 20 personas, quienes permitirían la operatividad de la secretaría administrativa, secretaría académica, contabilidad, informática, servicios generales y ayudantes generales.
Escala señaló que a lo interno de la universidad han fijado el 15 de noviembre como fecha límite para recibir respuestas del Ejecutivo, con el fin de definir si la apertura se concretará a o no durante el año que viene.
Y es que poner en funcionamiento una extensión universitaria como la que se pretende requeriría, al menos, de cuatro meses, de tal forma que se pueda organizar la matrícula de los estudiantes, el equipamiento de los espacios y adecuar el área administrativa, dijo.
Sin respuesta
Al consultar a la Secretaría de Metas respecto al tema, se informó que “en este momento no hay respuesta sobre esa solicitud”, refiriéndose a la nota del rector de la UP.
Esto, a pesar de que en por lo menos dos ocasiones el Órgano Ejecutivo le ha asegurado a la UP que el equipamiento de este espacio es un compromiso del Gobierno.
El secretario de Metas, Jorge González, ha sostenido en otras ocasiones que están buscando los fondos para este proyecto, ya que no estaban contemplados en el presupuesto de este año.
Las instalaciones
Este nuevo espacio para la educación universitaria está situado dentro del proyecto inmobiliario Ciudad Esperanza, que impulsa el Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial (Miviot) en el corregimiento de Vista Alegre.
El proyecto, en su conjunto, ocupa un espacio de 36 hectáreas, sin embargo, 5 de ellas fueron destinadas para uso exclusivo de la UP.
El Miviot precisó que la construcción del inmueble fue concluida y se adelantan los trámites con el Banco Hipotecario Nacional para hacer su traspaso oficial a la UP.

