La Asociación Panameña de Psiquiatría, como sociedad científica, no está en contra del advenimiento de nuevos fármacos. En el caso de medicinas que contengan componentes del cannabis para el tratamiento de algunas enfermedades deben cumplir con todos los requisitos científicos por los que pasan todos los fármacos para el consumo humano, y de allí dependerá su uso.
Hasta ahora no hay estudios concluyentes que demuestren su efectividad, porque se basan en reportes de casos, es decir, experiencias personales de quienes las usaron. Otro aspecto que nos inquieta es que la marihuana es uno de los estupefacientes más utilizados en el mundo, e incluso en el país, cuyas consecuencias sociales y personales llegan a nuestros consultorios.
Tememos que en vez de buscar una solución, lo que traigamos es un problema para el país. Además, hay leyes que permiten, con los debidos controles, la entrada de estos medicamentos.