La falta de camas en el Hospital de Especialidades Pediátricas (HEP) de la Caja de Seguro Social (CSS) obliga a los padres de familia que acuden en busca de atención para sus hijos a mantenerse en los pasillos y salas de espera.
Esta experiencia la vivió desde las 11:00 p.m., del pasado lunes, Doris Ortega, residente en el distrito de Arraiján, provincia de Panamá Oeste, con su hijo de siete meses de nacido.
El infante, afectado por un padecimiento en su sistema digestivo, recibió atención en instalaciones de salud de Panamá Oeste, como el Hospital Nicolás A. Solano, donde ordenaron su traslado hacía el HEP.
Ortega dijo ayer en la tarde –cuando conversó con este medio– que llevaba 14 horas sin dormir, por temor a que en un descuido su hijo se le cayera de las manos. Mostró un cartón con el número 39 que supuestamente corresponde a la cama que ocupará el niño cuando se libere, ya que en ese momento las 123 de que dispone el hospital tenían pacientes.
Desde el pasado lunes también espera por una cama para su hijo Auristela Tócamo. El niño, de siete años, tiene orden de hospitalización para tratar un problema en uno de sus ojos.
Mientras Tócamo conversaba, el menor se encontraba dormido sobre un grupo de sillas que sus padres acomodaron para él. Viajó desde la comunidad de Oquendo, un área de difícil acceso del distrito de Chimán, en la provincia de Panamá.
Franklin Cansarí, padre del niño, salió con este a las 8:00 a.m. del lunes rumbo al Hospital San Miguel Arcángel del distrito de San Miguelito, porque en aquella comunidad apartada no hay centros ni puestos de salud. A las 3:00 p.m. arribaron al centro hospitalario, pero el niño recibió atención a las 8:00 p.m. En ese momento deciden remitirlo al HEP.
Allí, con menos tiempo de espera, pero con la misma dificultad estaba Carolina Tomlinson, a cuyo niño de seis meses le diagnosticaron neumonía.
“Acabo de llegar. El niño está hospitalizado”, dijo la mujer mientras se lo acomodaba sobre sus piernas. Dijo que no lo podían subir a la sala de hospitalización porque no había cuna.
El hacinamiento
El pasillo que conduce a la dirección médica no es el único lugar abarrotado dentro del HEP. Una imagen similar se observa en la sala de espera de la planta baja del hospital, así como en algunos espacios abiertos en el segundo piso.
El director médico del HEP, Julio César Vega, atribuye la situación que afrontan a factores como la presencia de enfermedades de temporada y que el hospital llegó a la capacidad máxima para dar respuesta a los usuarios, lo cual es un problema de años.
Vega expresó que como el hospital es una instalación de tercer nivel, además de atender los casos que se presentan en la región metropolitana con la población infantil asegurada, también reciben las patologías de alto grado de complejidad de otros puntos del país, es decir, que su responsabilidad abarca todo el país.
Para mostrar las complicaciones que en materia de espacio viven en el hospital, Vega detalló que cuentan con 123 camas y que, usualmente, 115 están ocupadas ( 93.5%).
Explicó que no llegan al 100% porque existen niños con enfermedades infecciosas y, por el riesgo de contagio, no pueden utilizar las que están cerca. Es decir, le resta capacidad de respuesta a la demanda.
También se refirió al Cuarto de Urgencias, donde la situación desvela la crudeza de la crisis. Vega precisó que la ocupación de camas es del 180%, porque hay pacientes en las 21 camas que tiene la sala, y hay otros 38 pacientes que están en sillas recibiendo atención.
Y esa es la experiencia que están viviendo Ortega, Tócamo, Cansarí y Tomlinson.
“Tenemos el hospital copado y tenemos que atender a los pacientes, aunque sea en las sillas”, remarcó el director del hospital.
Datos estadísticos de la CSS dan cuenta de que en el cuarto de urgencias están atendiendo a unos 5 mil pacientes por mes, lo que significa que la demanda diaria promedio es de 166 atenciones. Mientras, los egresos diarios promedian los 20.
En este hospital infantil se atienden principalmente problemas gastrointestinales, crisis asmáticas, bronquiolitis, síndromes gripales, accidentes, traumas y fracturas.
Paliativos
El director de la CSS, Julio García Valarini, dijo que mientras no se construya un nuevo centro hospitalario para atender a la población pediátrica asegurada, lo que les queda es buscar alternativas para optimizar los espacios con los que cuentan.
Como parte de esa labor, adelantó que están buscando locales (para alquilar) para mudar las oficinas administrativas del hospital, y que haya más áreas para atención.
Sobre lo dicho por García Valarini, el director del HEP informó que ayer se reunieron con funcionarios de la Dirección Ejecutiva Nacional de Infraestructura y Servicios de Apoyo de la CSS y hablaron de aspectos como sacar la parte administrativa y trasladarla a un área fuera del centro pediátrico.
La Defensoría del Pueblo también llevó a cabo un recorrido esta semana por el hospital con el objetivo de conocer la realidad que están atravesando los pacientes y padres de familia.