Solo sueños e ilusiones cargan los migrantes en los raídos cartuchos que cuelgan en sus manos, y en las destartaladas mochilas que llevan a cuestas. En su andar, por tierra o mar, con rumbo o sin él, los alienta la ilusión de hacer fortuna en tierras extrañas.
En Europa o en América el peligro al cual se enfrentan es el mismo. Ayer, 778 de ellos fueron rescatados en aguas del Mediterráneo, mientras que otros 14 están desaparecidos, según los servicios españoles de rescate.
Igualmente, otros 188 que partieron del norte de África fueron rescatados en el Mediterráneo por la Guardia Civil.
España, principal vía de entrada de migrantes irregulares por mar en Europa, ha detectado desde el 1 de enero hasta el 18 de noviembre a 50 mil 911 migrantes, de los que 620 murieron en el intento.
Eduardo Stein
Enviado especial de la ONU.
Similitudes
En América del Norte la situación no es muy diferente. Los miles de migrantes centroamericanos que marchan hacia Estados Unidos le exigieron ayer a las autoridades de esa nación que les permitan solicitar refugio.
“Que nos dejen ya pasar, estamos ya desesperados, dejamos familia en Honduras. Necesitamos empezar a trabajar”, dijo en el área fronteriza de Tijuana, México, un migrante identificado como Wilson.
Desde el primer momento, el presidente estadounidense, Donald Trump, calificó la caravana de migrantes como una “invasión”, por lo que envió al área fronteriza con México miles de soldados, que, de ser necesario, están autorizados para emplear la fuerza letal.
Mientras, en América del Sur cientos de migrantes venezolanos sufren dentro y fuera de un albergue ubicado en Bogotá, Colombia.
En esa nación hay más de un millón de venezolanos, cantidad que va en aumento, toda vez que a diario llegan unos 3 mil más. Se estima que la cifra podría llegar a 4 millones para 2021, lo que le costaría a Colombia unos 9 mil millones de dólares.
Estados Unidos, Naciones Unidas, la Organización Internacional de las Migraciones y Europa aportan ayudas millonarias a Colombia para atender la crisis humanitaria, que incluye alojamiento, salud, alimentación, agua potable y acceso a la educación. El Gobierno colombiano descartó la posibilidad de establecer albergues permanentes.
Colombia, Perú y Ecuador son los principales receptores de los migrantes de la patria de Bolívar, que escapan de la escasez de alimentos, medicinas y de la inseguridad reinante en la otrora próspera nación.
Perú calcula que desde enero de 2017 ingresaron unos 550 mil venezolanos, mientras que Ecuador cifra en 300 mil los que están en su territorio .
Debate
La crisis migratoria es de tal magnitud, que desde ayer, jueves, representantes de 13 países, entre ellos Panamá, tratan en Quito, Ecuador, de buscarle una solución.
Al encuentro no asisten Venezuela ni Bolivia, país que sí estuvo en la primera cita de septiembre pasado, realizada también en Quito, cuando la región lanzó al presidente venezolano Nicolás Maduro, un llamado para que acepte ayuda humanitaria.
(Con información de Reuters, AP y AFP).

