La oposición de Nicaragua puso en duda la continuidad de las negociaciones con el Gobierno para buscar una salida a la crisis en el país tras una jornada donde la Policía arremetió con violencia para impedir una protesta.
“Creemos que acciones como esa no contribuyen al proceso de negociación y ponen bajo riesgo cualquier intento de encontrar una salida negociada a la crisis del país”, dijo el delegado de la opositora Alianza Cívica por la Justicia y Democracia, Max Jérez.
La acción de la Policía, que el sábado impidió violentamente una marcha opositora y arrestó a unas 164 personas, que luego liberó, fue rechazada por distintos sectores dentro y fuera del país.