A pesar del escaso progreso en las reuniones iniciales, los funcionarios noruegos han invitado a representantes del presidente autocrático Nicolás Maduro y su rival, Juan Guaidó, a una segunda ronda de conversaciones para distender la crisis de Venezuela, según legisladores familiarizados con las conversaciones.
Las sesiones podrían llevarse a cabo en Oslo tan pronto como la próxima semana.
Sin embargo, los aliados de Guaidó, jefe de la legislatura dominada por la oposición que afirma ser líder legítimo de Venezuela, insisten en que cualquier diálogo depende de que Maduro acepte la propuesta de celebrar nuevas elecciones presidenciales.
Un impulso diplomático múltiple para romper el amargo estancamiento político en Venezuela se inició la semana pasada, cuando una misión de la Unión Europea visitó Caracas y enviados de Guaidó y Maduro viajaron a Oslo. No obstante, el Gobierno rechazó la solicitud de celebrar elecciones generales, de acuerdo con diplomáticos y parlamentarios que hablaron de forma anónima debido a la naturaleza sensible de las conversaciones, aseguraron. Ninguna de las partes ha aceptado hasta ahora sostener más conversaciones, dijeron.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Noruega y el Ministerio del Poder Popular para la Comunicación y la Información de Venezuela declinaron comentar sobre la nueva oportunidad de reunirse. Guaidó, en un mensaje de texto el miércoles, dijo que “todavía no se ha concretado otra invitación”.
Durante meses, Maduro y Guaidó se han enfrentado, reuniendo seguidores en las calles y el apoyo de sus aliados en el extranjero.