Las lluvias del 7, 8 y 9 de diciembre de 2010 provocaron más de 500 deslizamientos de tierra en la parte alta del embalse Alajuela, de la Cuenca Hidrográfica del Canal de Panamá (CHCP).
La lluvia, conocida por los campesinos de áreas aledañas al Parque Nacional Chagres como “La Purísima”, ya que sucede cinco días antes o después del Día de la Madre, llevó al Canal a suspender durante 17 horas –la cuarta suspensión en toda su historia– el tránsito de buques, y afectó considerablemente la toma de agua de la potabilizadora de Chilibre (Federico Guardia Conte).
Informes de la gerencia de Recursos Hídricos de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) plantean que en el área de la cuenca del lago Alajuela se registró un significativo número de deslaves para esos días, pese a ser una de las zonas más cubiertas por bosques maduros, en un 84.3% (ver mapa).
Los registros de la ACP indican que entre 1998 y 2007 en la subcuenca del embalse Alajuela se dieron 544 deslizamientos. Actualmente, un investigador del Servicio Nacional de Geología de Estados Unidos trabaja con el apoyo de la ACP en georreferenciar las fotos captadas para precisar los puntos de deslaves y su cantidad exacta, aunque fotográficamente se tienen más de 500 registros. Es decir, que en solo 3 días se habrían registrado igual o más cantidad de deslizamientos que en 10 años.
El gerente de la sección de Recursos Hídricos de la ACP, Jorge Espinosa, manifestó que “La Purísima”, es la tormenta más fuerte registrada en la historia del Canal de Panamá.
Agregó que la mayor cantidad de sedimentos que llega a la CHCP es producida en la parte alta de la subcuenca de Alajuela.
Los estudios preliminares indican que los deslizamientos se originaron en las zonas más montañosas, con fuertes pendientes, altas intensidades de lluvia y menos deforestadas.
Espinosa explicó que “La Purísima” fue causada por tres factores: un frente estacionario, un sistema de baja presión y vientos de las Antillas. Estas condiciones climáticas provocaron que en 24 horas cayeran 788 milímetros cuadrados de agua –cuyo equivalente sería verter 788 litros de agua por metro cuadrado– estableciéndose un récord histórico, según reportes de una de las estaciones del Chagres.
Pero la recopilación de datos de la ACP da cuenta de que la lluvia promedio en 24 horas no sobrepasó los 284.8 milímetros, indicó Espinosa (ver mapa).
Las intensas lluvias llevaron al vertido, el pasado 8 de diciembre, de 149 mil 595 pies cúbicos de agua por segundo en Madden, caudal con el que se pueden llenar tres piscinas olímpicas (de 50 m de largo por 25 m de ancho) en solo dos segundos.
HISTÓRICOS CIERRES
Desde su inauguración –el 14 de agosto de 1914– las tormentas han sido responsables de la suspensión de la travesía de buques en 4 ocasiones. Esas tormentas fueron las del 20 al 24 de octubre de 1923; 7 al 9 de noviembre de 1931; 27 al 28 de noviembre de 1932, y del 7 al 9 de diciembre de 2010.
ESTUDIOS
Análisis del Servicio Nacional de Geología de Estados Unidos han indicado que en todas aquellas áreas en donde se ubican pendientes de montañas de 20 grados o más, y lluvias por arriba de los 200 milímetros comienzan a darse derrumbes. En Panamá, el 90% de las pendientes en la parte arriba del embalse de Alajuela es de 35 grados, lo que fue otro componente para que el lago quedara lleno de sedimentos, explicó Espinosa.
Durante las lluvias de diciembre de 2010, el lago Gatún alcanzó los 88.36 pies, lo que obligó a la ACP a abrir cinco válvulas de las alcantarillas de desagües de las esclusas de Gatún y Pedro Miguel.
Ante esto, la ACP estudia opciones para superar las actuales limitaciones del Canal, que incluye aumentar la capacidad actual del vertedero de Gatún, dijo el gerente de Recursos Hídricos.
El nuevo vertedero está en fase de diseño, pero se espera que esté listo entre 2014 y 2015. La construcción del nuevo vertedero no forma parte de la ampliación del Canal, sino de mejoras estructurales que se requieren.
ENFOQUE
Felix Wing* panorama@prensa.com
AMBIENTE. El Panel Intergubernamental del Cambio Climático define “La Purísima” como “aquel... evento raro en un lugar y en un instante en un año”. Considerando que Panamá fue sede hace unos meses de una importante reunión sobre el cambio climático, vale la pena reflexionar sobre lo que estamos haciendo y dejando de hacer como país.
Urge que el Gobierno, las empresas y los ciudadanos tomemos medidas urgentes para adaptarnos a las consecuencias generadas por el cambio climático y mitigar sus efectos. El derecho al agua es un derecho humano y se relaciona con los derechos a la vida, a la salud y a un ambiente sano.
“La Purísima” privó de ese derecho a los habitantes de la capital por varias semanas. Si no hubiese sido por la cobertura boscosa de la Cuenca Hidrográfica del Canal de Panamá, la situación hubiese sido peor.
Director del Centro de Incidencia Ambiental