Raúl de Saint Malo García reconoció que por instrucciones de los hermanos Martinelli Linares pagó $1.9 millones a la empresa Franconaves, a través de la cual se adquirió el helicóptero N1626L –ligado a Luis Enrique Martinelli Linares–, y que fue aprehendido por el Ministerio Público bajo sospechas de que fue comprado con dinero proveniente del blanqueo de capitales.
En indagatorias rendidas entre mayo y junio pasado ante la Fiscalía Especial Anticorrupción, De Saint Malo reveló que, tras un negocio de barcos tanqueros que acordó en 2013 con los hermanos Ricardo Alberto y Luis Enrique Martinelli Linares, formaron la sociedad Petro Trading Services Corp., a través de la cual se hicieron pagos a Franconaves y a otras sociedades.
Entre esas sociedades figuraban Desarrollo Inmobiliario Ibérico, Corporación de Energía del Istmo y Promotora y Desarrollo Los Andes, todas ligadas a la familia Martinelli y que son objeto de investigación por el Ministerio Público en el proceso relacionado con la constructora Odebrecht y otros casos judiciales.
LOS PAGOS DE RAÚL DE SAINT MALO
Raúl de Saint Malo García y Ricardo Alberto Martinelli Linares se conocieron en la Universidad de Georgetown, en Washington D.C., donde ambos estudiaban. Allí, además de la amistad, nació la idea de hacer un negocio en 2012: la compra de barcos tanqueros.
Así comenzó De Saint Malo a contarle a la fiscal especial anticorrupción, Tania Sterling, sus vínculos con el mayor de los hijos del expresidente Ricardo Martinelli.
La fiscal lo indagó el 8, 11 y 23 de mayo, y el 2 y 8 de junio pasado, por su presunta vinculación con el cheque de $1.9 millones emitido por la sociedad Petro Trading Services Corp. para la adquisición del helicóptero N1626L, aprehendido a los hermanos Martinelli Linares por la fiscalía, bajo la sospecha de que fue comprado con fondos provenientes del blanqueo de capitales.
De Saint Malo –a quien no se le impuso ninguna medida cautelar– siguió contando que inició conversaciones con la refinería de Jamaica para ofrecerle el servicio de transporte. Le presentó la idea a Ricardo Alberto Martinelli Linares, quien aceptó y concretaron el negocio.
El hijo del expresidente le indicó que “el banco de la familia de ellos, Global Bank, podía prestar los dineros” para financiar el negocio.
EL NEGOCIO, SOSPECHOSO
Hasta aquí, todo normal. Pero luego Ricardo Alberto Martinelli Linares le dijo a De Saint Malo “que el banco no iba a poder desembolsar el dinero a tiempo, pero que no había problemas, que ellos comprarían los barcos con su dinero, y una vez el banco desembolsara las hipotecas, se le repagarían”.
El monto que iba a dar el banco era de $17 millones. En diciembre de 2013, compraron tres barcos y arrancó el negocio, bajo la sociedad Star Tankers Bunkering, dijo De Saint Malo García.
Indicó que a pesar de no estar conformadas las hipotecas, el Global Bank desembolsa los $17 millones, “teniendo las firmas personales de los socios, en este caso fiador solidario de mi persona, el señor Ricardo Alberto Martinelli Linares y su hermano Luis Enrique Martinelli Linares”.
Precisó que Ricardo Alberto Martinelli Linares le dio la instrucción de que se colocaran los $17 millones en la cuenta offshore que tenía Star Tankers Bunkering en el Global Bank Overseas, cuenta a la que se llamó Petro Trading Services Corp.
EL PAGO AL HELICÓPTERO
Señaló De Saint Malo a la fiscal que entre enero y junio de 2014, “por instrucciones de ellos [Ricardo Alberto y Luis Enrique Martinelli Linares] se hicieron repagos a varias empresas”. (Ver ilustración).
La fiscal le presentó a De Saint Malo la solicitud de compra de cheque de gerencia emitido el 25 de junio de 2014, cuyo beneficiario es Franconaves, S.A., y él respondió: “Reconozco el monto y reconozco el beneficiario luego de verificar mis cuentas; pero jamás había visto la solicitud de compra, no lo firmé yo; nunca vi el original en su momento (...)”.
Interrogado por la fiscal sobre cómo se dieron las instrucciones para el pago vía cheque de gerencia a Franconaves, S.A., De Saint Malo respondió: “No lo recuerdo, solicité al banco la información y no me la han dado. Dicen que yo mandé un correo, pero no tengo copia”.
“Yo asumí que era de ellos [los Martinelli] y se gira un cheque por $1.9 millones a nombre de Franconaves, S.A.”, detalló.
La fiscal insistió y le preguntó a De Saint Malo García que cómo explicaba ese pago millonario a una empresa que desconoce, y él señaló que los socios mayoritarios (los hermanos Martinelli Linares) le dieron las instrucciones y eran empresas que ellos conocían y él dedujo que eran empresas personales de ellos.
De Saint Malo García también reveló que los Martinelli le dieron instrucciones para hacer pagos a otras sociedades.
Entre enero y junio de 2014, se hicieron pagos a Desarrollo Inmobiliario Ibérico por $4.5 millones. Esta sociedad, de Ricardo Alberto Martinelli Linares, es dueña de un apartamento en Madrid, España, valorado en $3 millones, y que la fiscalía mantiene aprehendido.
También se hicieron pagos a Corporación Energía del Istmo, sociedad de energía eléctrica en la que figuran como presuntos accionistas el expresidente Ricardo Martinelli Berrocal y sus dos hijos. Esta sociedad se capitalizó con $900 mil provenientes de Langton International Holding Limited, vinculada al dueño de Cobranzas del Istmo, Cristóbal Salerno.
Con esta sociedad, y tras supuestamente obtener información privilegiada, los Martinelli incursionaron en el mercado eléctrico local durante el gobierno pasado.
De Saint Malo García –hermano de la vicepresidenta y canciller, Isabel de Saint Malo de Alvarado– indicó que también se hizo un pago, sin precisar el monto, a Promotora y Desarrollo Los Andes, ligada a los Martinelli e investigada en el proceso por sobornos pagados por Odebrecht a través de bancos en Suiza. Detalló que el pago se hizo de una cuenta de Petro Trading Services Corp.
Al preguntársele si tenía conocimiento por quiénes estaban constituidas estas sociedades, dijo que no las conocía, pero que presumió que eran de los Martinelli.
Aclaró que tanto Petro Trading Services como Star Tankers Bunkering eran propiedad de los hermanos Martinelli, pero que él tenía la firma autorizada para hacer pagos. “Yo traía los clientes y ellos eran los socios capitalistas”, dijo.
Explicó que el nombre de Petro Trading Services Corp se cambió a Star Tankers Bukering por una decisión de mercado, aunque en realidad se unificaron los logos, membretes y páginas web.
Petro Trading Services Corp. fue disuelta el 13 de julio de 2016, y como liquidadora voluntaria figura Larissa Llamas, de acuerdo con la Gaceta Oficial de las Islas Vírgenes Británicas.
Según De Saint Malo, Larissa Llamas fue quien constituyó las sociedades para comprar los barcos.
Declaró que específicamente recibía instrucciones de Ricardo Alberto Martinelli Linares, con quien se reunía en las oficinas de Importadora Ricamar de Monte Oscuro. “(...) él me entregaba la hoja donde debía depositar el dinero y hablábamos del negocio”, explicó.
Interrogado si no le parecieron sospechosas esas transacciones, De Saint Malo dijo: “no me pareció sospechoso, yo asumí que todas las cuentas eran de ellos al 100%”.
“No tuve razón para pensar mal de ellos, ya que hasta donde yo sabía eran personas moralmente y económicamente potables”, declaró.
LOS NEGOCIOS DEL IMPUTADO
Star Tankers Bunkering fue una de las pocas compañías favorecidas con una licencia de la Autoridad Marítima de Panamá (AMP) en el gobierno pasado para prestar los servicios de venta de combustible en barcazas.
Esta licencia fue motivo de cuestionamientos por parte de una veintena de empresas del sector, que esperaban por varios años este tipo de concesión.