Una red organizada en la que participaban, al menos, 15 corredores de aduanas, empresarios dedicados a la importación de vehículos y funcionarios de la Autoridad Nacional de Aduanas (ANA), habrían logrado evadir decenas de miles de dólares en impuestos, producto de la importación de vehículos.
El grupo alteraba y falsificaba documentos claves para ingresar los carros al país, y se habría valido del sistema informático de la entidad para cometer el fraude.
En el caso estarían involucrados familiares del subdirector de la ANA, Vidal Del Mar, funcionario que -por ahora- no hace parte de la investigación.
El pasado 5 de octubre, la Dirección de Prevención y Fiscalización Aduanera, allanó una oficina de corretajes ubicada en vía Porras, vinculada a la familia de Del Mar, que por esos días estaba de vacaciones.
Habla el director
“Es algo que se viene investigando desde el año pasado. A mí la ley me prohíbe intervenir dentro de los procesos que se siguen, sin embargo, estoy enterado, de manera general, del proceso que se lleva a cabo. Puedo decir que en este caso en particular pueden haber entre 30 o 40 expedientes. Uno de esos expedientes, me enteré porque alguien lo mencionó, iba por 13 o 14 tomos”, aseguró a este medio José Gómez Núñez, director de la ANA.
Una red de corrupción enquistada en Aduanas
José Gómez Núñez, director de la Autoridad Nacional de Aduanas (ANA), habla con cautela cuando se refiere al caso. “Es algo que se viene investigando desde el año pasado”, dice cuando se le pide que dé detalles sobre el grupo organizado que creó un esquema para introducir carros nuevos y usados al país evadiendo impuestos.
La mayoría de esos vehículos venía de Estados Unidos.
Los actores
En esa red, informó, participaban corredores de aduanas, importadores de carros y funcionarios de la Autoridad Nacional de Aduanas.
En este momento, la ANA, a través de su departamento de Análisis, adelanta una investigación administrativa y se ha indagado a varios de los implicados; se ha retenido una cantidad considerable de vehículos y se ha quitado la licencia de corredores a varios de los sospechosos. “Es una investigación muy amplia que involucra, hasta el momento, a entre 10 y 15 corredores de aduanas [...] Se están acopiando las prueba. Se está indagando a algunas personas. Hemos procedido a cerrar el acceso al sistema informático de aduanas y hemos suspendido licencias a corredores de aduanas”, explicó Gómez.
Cuando se le preguntó si el subdirector de la entidad, Vidal del Mar, era investigado por el caso, Gómez contestó: “El subdirector no es parte de esta investigación, que yo sepa. Personas vinculadas a él sí lo son”.
Fuentes ligadas al proceso narraron a este medio que se le sigue la pista a dos hijos de Vidal del Mar, prominente figura del oficialista Partido Panameñista. De hecho, el pasado 5 de octubre fue allanada una empresa de corretaje de aduanas de los familiares del funcionario, que por esos días estaba de vacaciones.
En diciembre de 2016, Del Mar se sometió al Knockout que publica este diario los domingos.
¿No hay conflicto de interés entre ser el sub de Aduanas y tener una agencia de corretaje de aduanas?, le preguntó Flor Mizrachi. Y Del Mar contestó: “No, porque la oficina la lleva mi hermano. Y hasta se perdió un cliente por estar yo apoyando a este gobierno”.
‘Modus operandi’
El director de la ANA no dio detalles de cómo operaba la red para cometer los fraudes. Argumentó que la ley le impide intervenir en el caso, pero sí adelantó que aquí todo apuntaba a evadir impuestos. “Lo que se detectó fue evasión de impuestos. El tema de valores, el tema de la documentación que se aportaba, la declaración que hacían. Recuerde que el corredor de aduanas es un auxiliar de la gestión aduanera. En consecuencia, debe asegurarse de que los documentos que aporta no sean falsos”, añadió.
Este medio consultó ayer al Ministerio Público sobre si adelanta una pesquisa por este caso, pero se informó que hasta la fecha no tienen ningún proceso. En 2016, la procuradora, Kenia Porcell, dio a conocer la existencia de otro grupo delictivo en el que participaban funcionarios de la entidad y comerciantes, para evitar controles en la introducción de mercancía por el aeropuerto internacional de Tocumen.