Tres científicos estadounidenses ganaron ayer el Premio Nobel de Física 2017 por inaugurar una nueva era en la astronomía, al detectar las ondas gravitacionales, ondulaciones en el espacio y tiempo, previstas por Albert Einstein hace un siglo.
El trabajo de Rainer Weiss, Barry Barish y Kip Thorne coronó 50 años de esfuerzos experimentales por parte de científicos e ingenieros.
Medir las ondas gravitacionales proporciona una nueva manera de observar el cosmos, ayudando a los científicos a explorar la naturaleza de misteriosos objetos, como agujeros negros y estrellas neutrones. También estos avances pueden permitir el acceso a los inicios del universo.