El presidente estadounidense, Donald Trump, mantuvo la presión el lunes sobre los congresistas demócratas para que aprueben el financiamiento de su prometido muro en la frontera con México, al tiempo que la legislatura mostraba indicios de querer aprobar una medida de emergencia para evitar un cierre parcial del gobierno.
Los demócratas tienen escaso interés en darle a Trump los 5 mil millones de dólares que quiere para la frontera, y algunos republicanos vacilan en gastar más de los mil 600 millones ya asignados, pero el presidente ha indicado que quiere pelear por esos fondos, uno de los gastos más fuertes del Congreso dirigido por los republicanos antes de que asuma la mayoría demócrata el 1 de enero.
Trump tuiteó el lunes: “Nos ahorraríamos miles de millones de dólares si los demócratas nos dieran los votos para construir el muro”. No ofreció evidencia de cómo se crearían tales ahorros y volvió a amenazar con cerrar “toda la frontera en el sur si es necesario”.
El presidente invitó a los dos principales dirigentes demócratas, el senador Chuck Schumer y la representante Nancy Pelosi, a una reunión en la Casa Blanca el martes, pero esta podría ser aplazada.
Parecía posible que el 7 de diciembre se diera un cierre parcial del gobierno federal, pero Trump dijo a los reporteros el sábado a bordo del avión presidencial que estaría dispuesto a firmar una extensión de fondos por dos semanas para permitir las ceremonias de Estado en honor del difunto expresidente George H.W. Bush, que falleció el viernes. Trump se preparaba para un enfrentamiento decisivo con el Congreso, en sus intentos por conseguir miles de millones de dólares para el muro.
