Por $65.9 millones fue adjudicada al Consorcio HCG –conformado por las empresas Healthcare Products Centroamérica, S.A. e Ingeniería GER, S.A.– la licitación para el estudio, desarrollo de planos, diseño de sistemas especiales y pluviales y construcción del nuevo centro regional universitario de la Universidad de Panamá (UP) en San Miguelito.
El proyecto, que se desarrollará en un terreno cercano a la barriada Las Cumbrecitas, en el corregimiento Ernesto Córdoba Campos de Panamá norte, fue adjudicado el pasado 21 de octubre, luego de que la Comisión Evaluadora terminó de revisar las propuestas de las tres empresas participantes en el acto. Además, de HCG, la empresa China CAMC Engineering CO., LTD Panamá Branch ofertó $64.9 millones, y Aprocosa $67.8 millones.
El acto público comenzó en noviembre de 2018, con la publicación del pliego de condiciones, pero en el camino fueron presentados varios reclamos que, al final, alargaron la selección de la empresa durante 11 meses.
Así consta en el portal Panamá Compra, en el que se detalla que el último reclamo fue presentado el pasado 16 de septiembre por parte del proponente China CAMC Engineering CO., LTD Panamá Branch.
Ese reclamo, admitido el 18 de septiembre pasado, llevó a la Dirección General de Contrataciones Públicas a anular parcialmente el informe de la Comisión Evaluadora y ordenó que, a través de la misma instancia, se verificara el cumplimiento o no del documento denominado “Declaración Jurada de Medidas de Retorsión” por parte del proponente Consorcio HCG, indican los documentos publicados por Panamá Compra.
Luis Acosta, director del Centro Regional de San Miguelito, afirmó que les urge las nuevas instalaciones, pero el proceso se atrasó por los múltiples reclamos.
Sostuvo que ahora queda pendiente el refrendo de la Contraloría General de la República y entregar la orden de proceder.
La actual sede del centro regional de San Miguelito se ubica en un local de la Gran Estación, el cual tiene capacidad para mil 500 estudiantes, pero actualmente hay 4 mil 500 estudiantes, atendidos por 250 docentes y 80 administrativos.
“No estamos en un lugar adecuado para impartir clases. Aquí hay bares y discotecas que operan mientras cumplimos con nuestra labor de educar”, acotó.
Por su parte, Gustavo Bernal, expresidente de la Sociedad Panameña de Ingenieros y Arquitectos (SPIA) y miembro de la Comisión Evaluadora, sostuvo que el retraso del acto se debió a los diversos recursos legales que interpuso la empresa China CAMC Engineering CO., LTD Panamá Branch, aunque todos fueron solventados por las autoridades de la universidad.
Calificó como positivo que la situación se haya resuelto en beneficio de los estudiantes, quienes hoy en día reciben clases en instalaciones que no reúnen las mejores condiciones para ello.