A menos de una semana para que culmine el período de campaña electoral para las elecciones primarias del partido Cambio Democrático (CD), torneo que se celebrará el próximo 12 de agosto, los precandidatos presidenciales siguen en giras en el interior del país y divulgando sus propuestas.
Tanto Rómulo Roux como José Raúl Mulino, las dos figuras más visibles de la contienda, intentan seducir a sus copartidarios con cuñas en la radio, vallas publicitarias y los encuentros cara a cara.
La semana empezó con sazón: Mulino ligó a Roux con el caso de sobornos de Odebrecht. Después se dio a conocer que la Fiscalía Especial Anticorrupción solicitó levantarle el fuero electoral penal a Roux. El detonante: la campaña electoral de 2014, época en que Roux fungía como secretario general de CD, y firmó un contrato con la empresa de Joao Santana, publicista de José Domingo Mimito Arias, el entonces candidato presidencial de CD. Mónica Moura, esposa de Santana, confesó que Odebrecht pagó la campaña de Arias.
Mientras que Luis Felipe Glaize declinó su precandidatura presidencial y manifestó que apoyará a Roux, quien en los últimos días ha visitado Colón, Bocas del Toro y la capital.
En estas giras, Roux -que es presidente de CD- ha estado rodeado de diputados, dirigentes del partido y figuras que buscan un cargo de elección popular en las segundas primarias que realizará CD el próximo 30 de septiembre.
Mulino, a excepción de Bocas del Toro y Darién, ha visitado el resto de las provincias. En sus giras el exministro prometió convocar a una constituyente, eliminar la reelección en cargos de elección popular y adecuar las importaciones de productos agropecuarios, así como revisar la beca universal existente.
Mientras que Rodrigo Sarasqueta, que compite contra Roux y Mulino, asevera que se ha movilizado en todo el país. También propone una constituyente, además de reducir el impuesto de transferencia de bienes muebles del 7% al 5%.