El Centro de Incidencia Ambiental (CIAM) presentó ayer un documento dirigido a los candidatos a puestos de elección popular, que consolida lo que considera deben ser las prioridades para la gestión ambiental 2019-2024.
Solo tres candidatos presidenciales enviaron representantes al evento: Laurentino Nito Cortizo, del Partido Revolucionario Democrático; José Isabel Blandón, del Partido Panameñista; y el independiente Ricardo Lombana. Asistieron dos candidatos a diputado de circuitos de la capital, un principal y un suplente.
“El objetivo es que todos los candidatos a puestos de elección conozcan los principales retos que deben resolverse para que Panamá goce de un desarrollo sostenible”, manifestó Sonia Montenegro, directora ejecutiva del CIAM.
Resaltó la importancia de que los jóvenes se tomen el relevo de la lucha ambientalista. “No les dejamos las mejores prospecciones, pero sabemos que hay un grupo que ha tenido batallas muy duras para conservar y dejarles una herencia natural”, dijo.
El documento contiene una lista con 33 problemas prioritarios –y sus soluciones– divididos en 4 ejes.
En primer lugar, aborda 11 puntos que han quedado pendientes con la actual administración, como ratificar el Acuerdo de Escazú, sobre acceso a la información, la Participación Pública y el Acceso a la Justicia en Asuntos Ambientales, que está engavetado en la Asamblea Nacional; y reglamentar la ley de educación ambiental.
En cuanto a cambio climático y energía, hay temas como la priorización de energía renovable y la necesidad de establecer la eficiencia energética como política de Estado. La temática de calidad ambiental trata sobre la gestión de residuos sólidos, la necesidad de impulsar prácticas agrícolas sostenibles y garantizar el análisis de los impactos ambientales de proyectos de desarrollo, entre otros. La sección de biología y biodiversidad destaca la necesidad de fortalecer la capacidad técnica del recurso humano del Ministerio de Ambiente.
El último eje tiene nueve prioridades. Varios invitados hicieron un llamado a la necesidad de tener personas en el Legislativo que prioricen y manejen con tecnicismo estos temas.
