Los avances que se vislumbran en el horizonte apuntan a que las vacunas contra la enfermedad Covid-19 se encuentran por fin al alcance de nuestra mano.
Así lo plantea la Organización Mundial de la Salud, sin embargo, una vez que se hayan superado los retos inminentes -suministro suficiente y distribución eficaz de las vacunas y el acceso equitativo- se necesitará una serie de estrategias para fomentar su aceptación.
Eduardo Ortega Barría, asesor del Consorcio de Investigación de Vacunas Covid-19 Panamá, explicó que el reto más grande es pasar de vacuna a vacunación, y que se requiere una campaña de educación completa para que las personas estén de acuerdo con que la vacuna es segura, y la confianza crezca.
“Hay encuestas que muestran que hay un número importante de personas que dicen que se vacunarían al momento en que los demás lo realicen, es decir, el grupo indeciso, pero es bastante grande, y hay otro grupo que muestra estar de acuerdo con la vacuna”, expresó.
Ortega Barría sostuvo que se requiere que la campaña esté bien articulada -entre el Ministerio de Salud (Minsa), medios de comunicación y expertos en el tema-, para que las personas acuerden vacunarse, porque “este es un tema de que si no nos vacunamos vamos a seguir en esta área oscura de casos de transmisión comunitaria, enfermedad y muerte”.
El científico recordó que hay que trabajar en el tema porque en los sectores más humildes es en los que hay más personas con dudas al respecto, y las personas con más acceso a información adecuada e ingresos más altos se muestran más convencidas a vacunarse.
Una encuesta realizada por estudiantes de la Facultad de Medicina y Cirugía de la Universidad Latina de Panamá y supervisada por la científica Laura Patiño, evidenció que el 93% de las personas que formaron parte de la investigación consideraron que las vacunas son útiles, es decir, los encuestados conocían la funcionalidad de las vacunas, y que son efectivas en la mayoría de los casos.
También se observó que a mayor edad, había más rechazo frente a una vacuna contra la Covid-19. Por ejemplo, en el grupo etáreo de 18 a 30 años, un 82.5% contestó estar dispuesto a vacunarse; en el de 31 a 50 años, un 44.5% respondió afirmativamente; en el de 51 a 70 años hubo un 46% de respuestas positivas, y en la generación de 71 a 90 años hubo un 100% de respuestas negativas.
La encuesta fue realizada en 300 personas, en las provincias de Chiriquí, Bocas del Toro, Panamá, Los Santos y Colón. (Ver infografía).
Ivonne Torres-Atencio, directora del Departamento de Farmacología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá, coincidió con Ortega- Barría en que se requiere una campaña de docencia sobre qué son las vacunas, cómo trabajan, por qué es importante vacunarse, y en el caso concreto de las de Covid-19, cuál es la manera en que trabaja y los posibles efectos adversos, que son totalmente esperados, y cómo manejarlos.
Manifestó que, en general, la población en este momento se mantiene cautelosa, y en parte es debido a todo el proceso en el que se han ido desarrollando las plataformas vacunales, especialmente de las primeras que han sido aprobadas, ya que por su tipo de tecnología (ARN mensajero) es más rápida y fácil su producción, y ya se tenía investigación de base para esto.