El pasado 24 de diciembre fue publicada en Gaceta Oficial la Resolución 1637 de 25 de noviembre de 2021 de la Autoridad Nacional de Tierras (Anati), sobre una “titulación masiva” de tierras en los límites de la cuenca hidrográfica del Canal de Panamá.
Son, en total, 7 mil 436 hectáreas que serán tituladas presuntamente a favor de 13 mil 137 personas, específicamente en los corregimientos de Limón, Nueva Providencia y Santa Rosa, en Colón.
El anuncio llamó la atención de organizaciones ambientales y de diputados como Mayín Correa, quien solicitó información al administrador de la Anati, José Gabriel Montenegro, sobre si actualmente existen planes y categorías de manejo ambiental, con el fin de asegurar una explotación y desarrollo sostenible de estas tierras a titular.
Unas semanas antes, más de 70 oenegés habían logrado que el presidente Laurentino Cortizo derogara el Decreto Ejecutivo 141 del 26 de octubre de 2021, que creaba los certificados de acreditación de uso de suelo en áreas protegidas.
Con esta nueva resolución, tanto ecologistas como otros sectores interesados en el tema se hacen preguntas, como si es viable otorgar títulos de propiedad dentro de esta zona o cómo se garantizará el uso sostenible de la tierra en esta importante cuenca hídrica, luego de otorgar los títulos.
Se consultó al administrador de la Anati y comunicó que, como entidad, sólo respondieron “positivamente” a una solicitud de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) de declarar zona de regularización y titulación masiva los corregimientos de Limón, Nueva Providencia y Santa Rosa, que están dentro de los límites de la cuenca hidrográfica del Canal.
De acuerdo con el funcionario, la ACP podría catastrar de manera conjunta 3 mil 500 predios, beneficiando a igual cantidad de familias con la obtención de su título de propiedad y coadyudando a la conservación del recurso hídrico.
En cuanto al tema ambiental, Montenegro explicó que la ejecución de este proceso deberá conseguir el visto bueno de la Dirección de Áreas Protegidas del Ministerio de Ambiente.
El programa
La ACP —entidad que impulsa la iniciativa— precisó que, en conjunto con la Anati, desarrolla el “Programa de apoyo al catastro y titulación en la cuenca hidrográfica” desde el año 2006 y, hasta la fecha, 8 mil 941 propietarios de terrenos han sido beneficiados al recibir sus títulos de propiedad de forma más económica y segura.
Detallaron que, en total, unas 94 mil hectáreas han sido catastradas hasta este momento, lo que representa un 53.5% del total de las tierras que se espera sean tituladas en la cuenca hidrográfica bajo este sistema.
Para dicha entidad, el catastro de estas fincas garantiza la seguridad jurídica sobre la tenencia de la tierra, que para los moradores del área representa importantes beneficios relacionados al incremento del valor de sus propiedades y accesos a créditos para distintos fines.
En lo que respecta a la parte de conservación ecológica, la ACP enfatiza que el catastro y titulación en la cuenca se integra con los lineamientos de desarrollo que promueven el uso sostenible de los recursos naturales.
¿Cómo se lleva a cabo este proceso? Según la entidad, el Canal realiza un análisis tenencial de los corregimientos donde se incursiona y entonces solicita a la Anati que los declare temporalmente zonas de regularización y titulación masiva, como ocurrió recientemente en Limón, Nueva Providencia y Santa Rosa.
Luego, cuando el catastro y la titulación avanzan en esas áreas, se repite el mismo proceso en otros corregimientos.
“El catastro y la titulación conllevan una serie de actividades de campo que se siguen rigurosa y transparentemente, entre las cuales está: informar debidamente a los actores locales, autoridades y potenciales beneficiarios sobre el proceso a implementar, además de reuniones y visitas a los interesados, desarrollo de una encuesta y levamiento catastral”, explicó la ACP.
Además, mencionaron que la implementación del “Programa de apoyo al catastro y titulación” está acompañada de oportunidades para que los dueños, tras legalizar sus tierras, puedan participar en iniciativas que impulsa el Canal y que tienen que ver con producción agropecuaria, protección del ambiente y fuentes de agua.
Estadísticas suministradas por la ACP muestran que, en la actualidad, un 43% de mujeres ha logrado obtener la seguridad jurídica de sus tierras, mientras que el 57% restante corresponde a hombres.
Otra mirada
Una de las ambientalistas que ha seguido de cerca el tema es Susana Serracín, parte de la Alianza para la Conservación y el Desarrollo.
Para ella, la cuenca hidrográfica es una zona con un enorme valor estratégico, pues permite el funcionamiento del Canal, es fuente de agua potable de Panamá y Colón y brinda otros servicios ambientales.
“La deforestación y la contaminación son amenazas graves que tiene la cuenca hidrográfica del Canal, por lo que es prioridad ejercer controles efectivos y vigilancia sobre sus implicaciones ambientales, sociales y económicas”, acotó.
A juicio de Serracín, dadas las circunstancias, preocupa sobremanera un crecimiento rápido y descontrolado, así como el relajamiento de las normas para esta zona, lo que traería como consecuencia un “estrés insostenible” en esa valiosa cuenca hidrográfica.