La Sociedad Panameña de Pediatría hizo un llamado de atención sobre la reaparición en el país de enfermedades prevenibles a causa de la disminución de las campañas vacunación.
La organización médica citó un informe de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) que precisó que en Panamá, durante el primer semestre de 2020, hubo una disminución de entre el 30% y el 50% en el acceso y cobertura de vacunas en los niños menores de un año.
“Las muertes prevenibles causadas por falta de vacunación sistemática podrían ser mayor que las generada por la Covid-19”, indicó la Sociedad de Pediatría.
Según Alberto Bissot, presidente de la organización, este año apareció un caso de meningitis y otro de tosferina, ambas enfermedades prevenibles por vacunas.
“Hay muchas razones: miedo a la Covid-19 y los padres no llevan a sus niños a vacunar y el otro es que hubo una desfase en los esquemas de vacunas. Eso deja cierta preocupación. Hay que llevar a los niños a vacunar”, puntualizó el especialista.
Según Bissot, el tema no es para alarmarse, pero sí hay que hacer un llamado de atención a todos para evitar futuros rebrotes.
Frente a este escenario, la Sociedad de Pediatría hizo una serie de recomendaciones, entre las que están alcanzar a todas las personas que no han sido beneficiadas con la vacunación a lo largo de la pandemia contra enfermedades, como sarampión, difteria, rubéola, entre otras, que forman parte del programa de inmunización.
Además, instaron a reorganizar la estrategia de vacunación para garantizar que se mantenga el personal de salud convencional, de manera que haya siempre disponibilidad para vacunar a niños, niñas y adolescentes.
Realidad en la región
Esta situación no ha sido exclusiva de Panamá. En ese contexto, la OPS instó a los países a “cerrar la brecha” de inmunización que ocasionó que cientos de miles de niños no fueran vacunados el año pasado, debido a las interrupciones de los servicios de salud a consecuencia de la pandemia por Covid-19.
Para tener una idea, en América, durante 2020, se dejaron de vacunar 474 mil 395 niños contra la difteria, el tétano y la tos ferina, un 18.2% menos que en 2019. Asimismo, en 2020, se dejaron de vacunar 379 mil 208 niños contra el sarampión, la parotiditis y la rubéola, es decir, 13.9% menos que en 2019.
Para el organismo internacional, las restricciones a la circulación por la Covid-19 contribuyeron a que hubiese menos vacunaciones. Además, muchas personas se mostraron reacias a acudir a los centros de salud para solicitar las vacunas por miedo a contagiarse.
A juicio del pediatra infectólogo, Javier Nieto el principal problema con la situación actual es que la Covid-19 es una enfermedad que ha generado incertidumbre, y cualquier líder, para recuperar la economía y el bienestar social en estos momentos, concentrará todos sus esfuerzos en inmunizar contra el nuevo virus.
“El mismo recurso humano que utilizas para difteria y tuberculosis también lo usas para la Covid-19. Se trata de un recurso humano finito y quizás se ha priorizado la atención Covid”, acotó.
Por otra parte, mencionó que el tener enfermedades, como la tosferina o sarampión, a la larga pueden generar un problema más grave de salud pública, por lo que consideró “importante” prevenirlas cuanto antes.
La estrategia
La jefa del Programa Ampliado de Inmunización del Ministerio de Salud (Minsa), Itzel Hewitt, subrayó que, si bien es cierto que este año se han dado dos casos de enfermedades emergentes, esto no tiene que ver con una disminución en la campaña de vacunación o problemas de logística en la aplicación del tratamiento.
“Los casos se presentaron en comunidades indígenas con comportamiento radical. Incluso, en uno de los casos, el jefe indígena de la comunidad no permitió que aplicáramos la vacuna”, explicó la funcionaria.
No obstante, reconoció que en 2020, en medio de la pandemia, hubo una disminución en la cobertura de vacunación, que estuvo entre un 18% y un 30% en algunos renglones de vacunas, debido principalmente a que había mucho temor por parte de los padres de familia de llevar a sus hijos a las instalaciones hospitalarias, y lo irregular que fue la atención durante el año pasado.
De acuerdo con Hewitt, Panamá fue uno de los países menos afectados en su programa de vacunación. También envió un mensaje: la población debe mantener la guardia, no solo en el tema de la Covid-19, si no también con otras enfermedades. Es importante que la población acuda a vacunarse.
Recordó que, de momento, se encuentran aplicando la vacuna contra la influenza en centros de salud, policlínicas, hospitales y otras instalaciones médicas.
Sin embargo, agregó que más adelante también vacunarán en centros comerciales, iglesias y terminales de transporte.
Para la presente jornada de vacunación contra la influenza, el Minsa ha adquirido un millón de dosis.