Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) solo han publicado una fracción de los datos que recopilaron sobre la pandemia de la Covid-19, informó esta semana The New York Times, citando a varias personas familiarizadas con los datos.
Cuando los CDC publicaron los primeros datos significativos sobre la efectividad de los refuerzos en adultos menores de 65 años hace dos semanas, omitieron los números de una gran parte de esa población: personas de 18 a 49 años.
Además, la agencia recientemente presentó un tablero de datos de aguas residuales en su sitio web que se actualizará diariamente y podría proporcionar señales tempranas de un aumento inminente de casos de Covid. Algunos estados y localidades habían estado compartiendo información sobre aguas residuales con la agencia desde el inicio de la pandemia, pero nunca antes había publicado esos hallazgos.
Sin los datos de refuerzo para personas de 18 a 49 años, los expertos externos a los que las agencias federales de salud piden consejo tuvieron que confiar en los números de Israel para hacer sus recomendaciones sobre las vacunas. (Después de varias consultas de The New York Times sobre los datos de refuerzo para ese grupo de edad, la agencia lo publicó en su sitio web el pasado 17 de febrero en la noche).
Kristen Nordlund, portavoz de los CDC, dijo al periódico estadounidense que la agencia ha tardado en publicar los diferentes flujos de datos, “porque básicamente, al final del día, aún no está listo para el horario de máxima audiencia”.
Sostuvo que la “prioridad de la agencia al recopilar cualquier información es garantizar que sea precisa y procesable”.
Añadió que otra razón es el temor de que la información se malinterprete.
El subdirector de Ciencia y Vigilancia de la Salud Pública de los CDC, Daniel Jernigan, señaló que la pandemia expuso el hecho de que los sistemas de datos en los CDC y a nivel estatal están obsoletos y no están preparados para manejar grandes volúmenes. Los científicos de los CDC están tratando de modernizar los sistemas, indicó. “Queremos datos mejores y más rápidos que puedan conducir a la toma de decisiones y acciones en todos los niveles de la salud pública, que puedan ayudarnos a eliminar el retraso en los datos que nos ha frenado”, agregó.
Los CDC también tienen múltiples divisiones burocráticas que deben aprobar publicaciones importantes y sus funcionarios deben alertar al Departamento de Salud y Servicios Humanos, que supervisa la agencia, y a la Casa Blanca, sobre sus planes.
La agencia a menudo comparte datos con Estados y socios, antes de hacerlos públicos. Esos pasos pueden agregar retrasos.
El desempeño de las vacunas y los refuerzos, particularmente en adultos más jóvenes, se encuentra entre las omisiones más evidentes en los datos que los CDC han hecho públicos.

