El Congreso de Chile aprobó ayer un proyecto de ley que sanciona los actos violentos y saqueos durante manifestaciones, presentado en noviembre de 2019 por el gobierno del presidente Sebastián Piñera, en medio de las protestas y disturbios que sacudían al país.
La ley fue aprobada con 87 votos a favor y 56 en contra. Ahora deberá ser promulgada por Piñera, quien la envió como medida para aplacar los hechos violentos al margen de las manifestaciones.
El texto –que ya había sido aprobado en el Senado– “plantea sanciones para quien interrumpa completamente la libre circulación de personas o vehículos en la vía pública; a quien lance a personas o vehículos que se encuentren en la vía pública instrumentos, utensilios u objetos cortantes, punzantes o contundentes; y para quienes roben o hurten con ocasión de calamidad pública o alteración del orden público”, indicó un comunicado de la Cámara de Diputados.
La oposición acusó al gobierno de Piñera de promover la ley para criminalizar la ola de protesta social que estalló el 18 de octubre pasado.
“El oficialismo y algunos legisladores de centro defendieron la propuesta remarcando que sus líneas no apuntan a penalizar la protesta social sino al vandalismo que se ha vinculado a ella”, indicó el Congreso.