José Luis Lacunza, obispo de Chiriquí, y a partir del sábado cardenal de Panamá, lo contó ayer durante la misa en la parroquia San Lucas, en Costa del Este. El papa Francisco mandó una carta a los futuros cardenales en la que les pide “humildad”. Que no se les suba “la fama” a la cabeza.
El diario oficial del Vaticano, L'Osservatore Romano, publicó extractos de esa misiva en la que el Pontífice dice: “Mantenerse con humildad durante el servicio no es fácil cuando se considera el cardenalato como un premio, como la culminación de una carrera, de una dignidad de poder y de una distinción superior”.
“Muchos se alegrarán por esta nueva vocación y, como buenos cristianos, lo celebrarán, porque es propio del cristiano disfrutar y saber festejar. Acéptalo con humildad. Solo trata de que, en estas fiestas, no se insinúe el espíritu mundano que aturde más que la grappa (aguardiente) en ayunas, desorienta y separa de la cruz de Cristo”, recomendó Francisco.
El domingo 4 de enero de este año, Francisco anunció la creación de 20 nuevos cardenales. El Papa puede elegir 15, mientras que los otros 5 sobrepasan los 80 años, por lo que no pueden participar en la votación en caso de que la Iglesia requiera del nombramiento de un nuevo pontífice. Tampoco pueden ser electos, aunque sí tendrán voz. Entre los electores se encuentra Lacunza.
En ese grupo están, además, los arzobispos de Valladolid (España), Ricardo Blázquez; Morelia (México), Alberto Suárez Inda, y Montevideo, Daniel Fernando Sturla Berhouet, entre otros. Con el consistorio que de esta semana, el número de cardenales se eleva a 228. Serán electores un total de 125.