Semanas atrás, La Prensa le preguntó a la rectora de la Universidad Autónoma de Chiriquí (Unachi), Etelvina Medianero de Bonagas, su relación con la Atlantic International University (AIU) –que carece de acreditación de los reguladores de educación en Estados Unidos– y su respuesta fue: “ninguna”.
“Le escribimos respecto a su representación como contacto en Panamá de la Atlantic International University… ¿Es ético que la rectora de la Unachi sea también representante de la AIU en Panamá?, una universidad que no cuenta con acreditación de ninguna autoridad educativa en Estados Unidos”, le escribió La Prensa a la rectora.
Su respuesta llegó en mayúsculas cerradas: “No tengo ninguna representación ni nacional e internacional. Mi única representación es con la Unachi. Sepáreme de ese tema, que le envío un documento formal después porque no estoy en la universidad…”. El documento “formal” nunca llegó.
La relación
Lo que sí hay son evidencias de la relación negada. Medianero de Bonagas viajó a Estados Unidos del 22 al 24 de febrero de 2017 para recibir un reconocimiento y presenciar –como invitada de honor– la graduación de la AIU. La acompañó Rosa Moreno, vicerrectora administrativa, y la secretaria general de la Unachi, Blanca Ríos.
También fue parte de la delegación Miguel Samudio –que era director de Cooperación Técnica Internacional de la Unachi. No obstante, Samudio fue a recibir su diploma de graduación de la AIU, que entregó la propia Medianero de Bonagas, en representación de la universidad extranjera.
Moreno, Ríos y Medianero de Bonagas fueron sentadas en la mesa principal y entregaron diplomas. La rectora, a su vez, recibió su reconocimiento, según las páginas web de la Unachi y de la AIU.
La rectora, rodeada de sus subalternos, recibió del presidente del Consejo de Administración de la AIU, José Mercado, la medalla del Mérito Académico (Medal of Academic Merit). Mercado dijo: “La rectora nos honra con su presencia; ha hecho cosas extraordinarias para su universidad en Panamá, por ello es merecedora de recibir uno de los máximos honores”.
Viáticos
Los viáticos del viaje de las funcionarias fueron costeados por la Unachi, según el informe de rendición de cuentas. La rectora y la vicerrectora administrativa recibieron viáticos de $1,800 cada una. Además, Medianero de Bonagas recibió $1,192 en concepto de transporte, mientras que Ríos recibió viáticos por $1,500.
Los viáticos de Samudio los pagó la Unachi ($2,250.00 por 10 días), sin incluir los pasajes de avión.
Según los informes, los viáticos se justificaron así: “Viajar a Estados Unidos con el fin de asistir como oradora en la ceremonia de graduación en la Atlantic Internacional University, reuniones y firma de convenio” de colaboración general y específico de la AIU y la Unachi.
Medianero de Bonagas y Samudio fueron nombrados representantes de la AIU en Panamá y en la Unachi, designación que hoy la rectora niega, pese a que su nombre sigue apareciendo en la página de la AIU. Samudio fue eventualmente sustituido por José Rojas como representante de la AIU. Rojas es cofundador de la Universidad Iberoamericana, el negocio de la familia Bonagas.
El convenio
En el portal digital de la Unachi aparece un acuerdo de cooperación firmado con la AIU para el periodo 2019-2023, refrendado por la Contraloría dos años después del viaje de la rectora. Este tiene como objetivos potenciar la ciencia, tecnología, ejecución de proyectos, pasantías, seminarios, estudios de postgrado, asesorías académicas, proyectos de investigación, encuentro de docentes e intercambios.
En su discurso –como oradora principal, posteado en la página web de la AIU– Medianero de Bonagas dijo que las universidades tienen los mismos objetivos, como fortalecer el crecimiento de la academia, tanto de la AIU como de la Unachi; y que uno de sus objetivos es facilitar la movilidad de los académicos, administrativos y estudiantes para compartir experiencias de investigación, innovación y tecnología.
Precisamente, los diplomas de la AIU han propiciado esa “movilidad”, facilitando el aumento de salarios de miembros del personal docente y administrativo de la Unachi, pese a que no es reconocida por las autoridades educativas de EU.
