Un informe. El presidente Laurentino Nito Cortizo cumplió a cabalidad con el propósito de la palabra informe: más de la mitad de su intervención ayer en la Asamblea Nacional la dedicó a enumerar una serie de proyectos que ha puesto en marcha su administración durante los últimos seis meses, pero sin contexto, profundidad, y sin mencionar que algunos arrancaron en el gobierno pasado.
Mezcló obras de gran y mediano impacto, con otras de menor trascendencia. Leyó, leyó, y leyó, durante 117 minutos. En total, dijo, son 56 obras públicas terminadas y entregadas con una inversión de $564.5 millones.
Su discurso-informe en el palacio Justo Arosemena, empezó con un minuto de silenció en honor a las más de 7 mil personas que han muerto en el país por la Covid-19. Luego hizo gala del estilo Cortizo, con la mención de la conquista de “sexta frontera” para vencer la desigualdad a través del Plan Colmena.
Pero antes de profundizar en este tema, le dio paso a los números de la macroeconomía: “Solo en el último semestre de 2021, la inversión del Estado para impulsar la economía del país fue de $2 mil 785 millones”, dijo. Aquí obvió que la mayoría de los fondos para la llamada “reactivación económica” han ido a programas oficiales que han estado marcados por la opacidad, como Capital Semilla, por ejemplo, iniciativa a Cargo de la Autoridad de la Micro, Mediana, y Pequeña Empresa (Ampyme), y de las que se conoce quiénes son sus beneficiarios. En los últimos días se ha visto a diputados del Partido Revolucionario Democrático (PRD) entregando esta ayuda en sus circuitos electorales. “Debo destacar que, a pesar de la pandemia y sus consecuentes restricciones, la ejecución presupuestaria del gobierno central, en el 2021, fue del 96%. La ejecución más alta de los últimos 15 años”, dijo a continuación. Un ciudadano en Twitter le recordó que “tener 96% de ejecución en gasto corriente no es para fanfarronear”.
Y luego lanzó otro número optimista: “alcanzamos un crecimiento económico de 14.9%, liderando el crecimiento de la región. Este dato, dijo, es del Instituto de Estadística y Censo de la Contraloría. No obstante, esta cifra tiene un efecto rebote estadístico debido a que parte de una base muy baja de 2020, cuando el país sufrió una de las caídas más profundas del mundo, según han señalado las propias calificadoras de riesgo.
José Isabel Blandón, presidente del opositor Partido Panameñista, lo explicó mejor en un tuit: “El crecimiento del PIB se mide en comparación con el año anterior. Si en el 2020 estuvo casi todo el comercio cerrado por varios meses, es obvio que habrá un repunte importante en el 2021. Están comparando comercios cerrados vs comercios abiertos, de no vender nada a vender algo”.
La cifra también tiene otra lectura: algunos analistas advierten que ese crecimiento del PIB “está inflado” por el movimiento de la minería, que al final no deja efectivo en el país. De hecho, un informe del Ministerio Economía y Finanzas, sobre los sectores que impulsan la reactivación económica, ponen a la minería como el principal.
La salud
La salud, y el programa de vacunación para mermar los efectos de la pandemia, entraron a escena. Cortizo, quien llegó al poder el 1 de julio de 2019, impulsado por su partido el PRD, dijo que el 81.4% de la población está vacunada ya sea con Pfizer o con AstraZeneca. De paso anunció que ayer a las 11:15 de la noche llegaban a suelo panameño 60 mil dosis de vacunas pediátricas para vacunar a niños y niñas de 5 a 11 años. En esta parte del discurso también dijo que ya empezó la construcción del Hospital del Niño, obra que cuesta $443.8 millones. Estas dos noticias fueron recibidas con entusiasmo en las redes sociales, sobretodo porque la construcción de ese hospital fue dilatado en los dos últimos gobiernos.
Mencionó ligeramente el moribundo programa de Invalidez, Vejez, y Muerte, de la Caja de Seguro Social. Dijo que espera la Organización Internacional del Trabajo haga el estudio actuarial de este programa “para la toma de decisiones”. No mencionó el diálogo que empezó hace casi un año para analizar este tema. Paralelamente, Rafael Mezquita, uno de sus asesores, decía en Telemetro que “las reformas requeridas tendrá que hacerlas el nuevo gobierno”, pues el de Cortizo solo llegará hasta el informe actuarial. Recordó que en la administración de Martín Torrijos (2004-2009) y también del PRD, las reformas a la CSS, las fiscales, y el referendo para la ampliación del Canal de Panamá (ACP) se hicieron en sus primeros dos años, pues en esa época “tenía capital político”. Si lo que dice su asesor es cierto, este sería el tercer gobierno consecutivo que aplaza tomar una decisión.
Los subsidios
Siguió con los subsidios que ha entregado a la población. El Programa de Transferencia Monetaria Condicionada transfirió $112 millones a 191 mil 373 panameños vulnerables. Aquí listó uno a uno los programas con montos y números de beneficiarios. También mencionó el subsidio energético: $86 millones en seis meses. Además, se refirió a los $71 millones de la ayuda por el gas licuado que se usa para cocinar (el tanquesito de gas). Y luego, su programa insignia: Panamá Solidario, con el que este gobierno ha ayudado a personas que han quedado sin empleo en medio de la pandemia. En el último semestre este plan ha implicado un desembolso de $442.7 millones para poner en marcha sus componentes: bolsas de comida, y vales digitales.
Ricardo Lombana, excandidato presidencial independiente y líder del partido en formación Movimiento Otro Camino, le recordó lo que podría ser uno de los grandes reclamos de la ciudadanía, sobre este asunto: “seguimos cometiendo el error de querer evaluar positivamente los subsidios, solamente enumerando la cantidad de millones que se entregan, pero nunca evaluando su impacto real en la mejora de calidad de vida de las personas, así como cuánto de eso queda en cantinas o tragamonedas”, escribió en Twitter.
Lombana, siguió explicando: “subsidios, sí, para todo el que lo requiera. Pero no tirando millones a un barril sin mediciones y criterios técnicos y científicos. Ese es el informe que debe dársele al país. No sacas de la pobreza solo entregando plata, sino con un plan social de seguimiento a la efectividad”.
El crecimiento del PIB se mide en comparación con el año anterior. Si en el 2020 estuvo casi todo el comercio cerrado por varios meses, es obvio que habrá un repunte importante en el 2021. Están comparando comercios cerrados vs comercios abiertos, de no vender nada a vender algo.
— José Isabel Blandón (@BlandonJose) January 2, 2022
Entonces, a continuación el mandatario se explayó en lo político, y en la larga lista de obras, proyectos, que ha entregado, licitado, o que ya están en etapa de orden de proceder. Leyó como quien lee una lista de regalos. Aquí marcaron la pauta frases como “giras de trabajo comunitario Colmena”, “hombro a hombro con la gente”, “tierra adentro”, y el “yunta pueblo gobierno”, doctrina que le hace un guiño al PRD de la dictadura, de los tiempos de Omar Torrijos. Esta frase se ha insertado en el discurso de ministros y algunos diputados del PRD. Frecuentemente aparece en la retórica de Rafael Sabonge, ministro de Obras Públicas; o de María Inés Castillo, de Desarrollo Social. También la ha usado la diputada de Arraiján, Kayra Harding.
Guiño a los diputados
También hubo guiños para los diputados. Mencionó a algunos cuando se refería a una obra específica, demostrando, el poder que el Legislativo tiene en la dinámica del Ejecutivo “Alina... esto va para ti... 8-9″, señaló en un momento. “Olivares, cógelo con calma”, mencionó en otra pausa. Se refería a sus copartidarios los diputados Alina González, y Olivares Frías. Y para referirse a una gira que hizo por Arraiján, enfatizó: “con algunas diputadas”.
Lo que omitió
El discurso omitió temas relevantes para la ciudadanía, como las iniciativas para combatir la corrupción que prometió en campaña. Tampoco dijo nada del futuro del cuarto puente sobre el Canal, ni sobre los avances de la construcción de la tercera línea del metro, y si hará cambios en su Gabinete.