Garantizar los derechos de los niños y niñas sin importar el país de nacimiento y coordinar las acciones interinstitucionales que permitan brindar atención a menores extranjeros y en condición de vulnerabilidad son dos nuevos retos que el Estado asumió ayer.
Lo anterior se desprende de la firma del Protocolo para la Identificación, Referencia y Atención de las Niñas, Niños y Adolescentes en busca de la condición de refugiado que requieren Protección Internacional.
El documento fue firmado por el ministro de Gobierno, Carlos Eduardo Rubio, y la directora general de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia, Yazmín Cárdenas.
Rubio y Cárdenas dejaron claro que, aunque estos casos no se reportan con frecuencia en el país, es importante garantizar y proteger la salud física, mental y moral de todos los niños en el país, independientemente de su país de origen.
Datos de la Comisión de las Naciones Unidas para los Refugiados dan cuenta que de los 68 millones de desplazados que hay en el mundo, el 52% son niños.