El Gobierno, a través de Autoridad de Turismo de Panamá, envió consultas tanto a la Procuraduría de la Administración como a la Dirección General de Contrataciones Públicas, para conocer la viabilidad de usar el centro de convenciones Amador, en Ancón.
Este inmueble, cuyo costo es de $207 millones, tiene un 99% de avance y aún no ha sido entregado al Estado. Por tal razón la entidad que licitó la obra pidió opinión sobre la utilización del inmueble, para atender allí a pacientes contagiados con Covid-19.
Mientras se toma una decisión al respecto, el Ministerio de Salud, junto a la Caja de Seguro Social, hicieron una inspección al lugar para conocer su condición.
Sión Atencio, director de Infraestructuras del Ministerio de Salud, explicó que en el sitio cabrían 796 camas y que ya cuentan con un diseño en caso que reciban un concepto favorable tras las consultas realizadas.
De hecho, una de las preguntas que se le hace al procurador de la Administración, Rigoberto González, es que si incluyendo una adenda al contrato del centro de convenciones se podría usar la estructura, ante la actual emergencia nacional.
Atencio subrayó que hasta el momento no han recibido una respuesta, y que habilitar allí 796 camas de hospitalización tendría un costo de 1.2 millones de dólares. Estos trabajos serían ejecutados por la empresa China State Construction Engineering Corporation (CCA), misma que construye el centro de convenciones.
“Ya vimos la capacidad del lugar, evaluamos dónde se pueden colocar los tanques de oxígeno, así como por dónde pueden entrar y salir los pacientes junto a la Caja de Seguro Social. Ahora solo nos queda esperar la respuesta a nuestras consultas”, concluyó el funcionario.
Desde 2012, la construcción del complejo para eventos de 56 mil metros cuadrados ha estado plagada de obstáculos, desde la salida del contratista original, la demora por trabajos mal ejecutados y la quiebra de una de las empresas a cargo del proyecto en 2016.
China State Construction Engineering Corporation (CCA) es ahora la única responsable del proyecto.
Otros inmuebles
Además de Amador, el Ministerio de Salud ya realiza adecuaciones en otros centros de convenciones como Figali, también en Ancón, y Atlapa, en San Francisco.
En el caso del Figali, el cual fue el primero donde comenzaron trabajos este mes, se pretende instalar 160 camas a un costo estimado de $700 mil. Mientras que en Atlapa el plan es adecuar 260 camas de hospitalización a un costo de $900 mil.
En esta última infraestructura se informó que el gasto es más elevado porque tienen que llevar a cabo mejoras al techo y también hacer una limpieza en los ductos del viejo inmueble.
Entre los tres centros de convenciones, las autoridades de Salud buscan instalar 1,216 camas hospitalarias, para hacer frente a la alta demanda de atención médica causada por la Covid-19.