El Grupo de Lima, integrado por una docena de países latinoamericanos y Canadá, llamó ayer a la comunidad internacional a “unirse para detener la tragedia humana en Venezuela” y lograr “un futuro democrático” en esa nación, según un comunicado emitido tras una reunión en Gatineau, Quebec.
“Estamos haciendo un llamamiento a todos los países”, expresó en una conferencia de prensa François-Philippe Champagne, Ministro de Relaciones Exteriores de Canadá.
“Necesitamos hablar con una sola voz, como socios internacionales, para encontrar nuevos enfoques para poner fin a la crisis política, humanitaria y económica, haciéndonos eco del deseo del pueblo venezolano y del presidente interino Juan Guaidó [...]. El tiempo apremia”, aseguró Champagne.
Según la nota conjunta difundida tras la reunión, “si bien la Constitución venezolana prevé la celebración de elecciones parlamentarias en 2020, la democracia se restablecerá plenamente en Venezuela sólo mediante elecciones presidenciales libres, justas y creíbles”.
El grupo considera, además, que “el sufrimiento humano ha alcanzado un nivel intolerable” en Venezuela. “Esto contribuye a la urgencia de una salida pacífica y democrática de esta crisis que se deteriora rápidamente”, agregó.
Unos 4.5 millones de venezolanos han dejado el país desde fines de 2015, según la ONU. Y asegura que “si bien son los venezolanos quienes decidirán en última instancia, la comunidad internacional tiene un papel crucial que desempeñar”.
El Grupo de Lima es un bloque regional formado en 2017 con el objetivo de buscar una solución a la crisis política y económica en Venezuela, donde ejerce el poder Nicolás Maduro.
Desde su inicio, el grupo ha realizado una serie de declaraciones que han tenido poco efecto tangible sobre la situación en Venezuela.
La reunión en Ottawa del Grupo de Lima, que incluye a Bolivia, Brasil, Chile, México y Panamá, entre otros, siguió los pasos de una gira internacional de Guaidó, que incluyó una reunión en la Casa Blanca con el presidente Donald Trump y una visita al primer ministro canadiense, Justin Trudeau, con el objetivo de obtener apoyo.
Más de 50 países ya reconocen a Guaidó como presidente interino del país, luego de la reelección de Nicolás Maduro en 2018, desconocida por la oposición y gran parte de la comunidad internacional por considerarla fraudulenta.
Guaidó denuncia allanamiento ilegal a vivienda de su tío
Agentes de Contrainteligencia Militar allanaron ayer la residencia de Juan Márquez, tío del presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, detenido desde el pasado 11 de febrero, a su llegada a Venezuela.
“La dictadura cobarde está allanando la vivienda de mi tío Juan Márquez. Con los órganos represivos y de persecución, buscan seguir con esta farsa que nadie les cree”, escribió Guaidó en Twitter. “Si piensan que vamos a retroceder en las acciones que hemos tomado y vamos a tomar, se equivocan. Avanzaremos”, dijo.
A las afueras de la residencia de Márquez, ubicada en Caracas, la parlamentaria opositora Delsa Solórzano sostuvo que se trata de “un proceso de allanamiento completamente ilegal”.
Los funcionarios no permitieron el ingreso de los abogados, denunció Joel García, jurista a cargo de la defensa de Márquez.
Periodistas de la AFP constataron la presencia de una patrulla de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM), que fue ingresada al estacionamiento del edificio por uniformados encapuchados.
“Intenté ingresar y no me dejaron entrar los funcionarios de la DGCIM. Cuando no permiten que el abogado de confianza acompañe [el allanamiento] es porque vinieron a sembrar evidencias”, expresó el abogado a periodistas.