La elección de la junta directiva de la Asamblea Nacional, acto que se concretará hoy jueves 1 de julio, terminó de profundizar las grietas a lo interno de Cambio Democrático (CD), luego de que Yanibel Ábrego, secretaria general de partido, y otros 13 diputados de esa agrupación reiteraran que votarán por Crispiano Adames, el candidato del oficialista Partido Revolucionario Democrático (PRD) a la presidencia de ese órgano.
En la otra esquina está Rómulo Roux, presidente de CD, quien emerge con un duro discurso contra todo lo que implique al gobierno de Laurentino Nito Cortizo. “Somos partido de oposición. No seremos cómplices de un gobierno fallido que dio la espalda a su pueblo. 14 personas entregadas al gobierno y que traicionaron a 300 mil copartidarios no definirán el futuro de nuestro partido”, es parte del discurso con el que Roux se desliga de cualquier alianza con el PRD.
La escogencia del nuevo jefe del Legislativo es solo la primera carrera de calentamiento rumbo al maratón que implica la contienda política de 2024. Roux, quien en los comicios de 2019 perdió ante Nito Cortizo, del PRD, por menos de 50 mil votos, una vez más buscará llegar al palacio de Las Garzas, pero, a juicio de politólogos y analistas, necesita tener el control de su partido. Y no la tiene fácil, con Yanibel Ábrego como principal frente en el propio CD.
Desde hace varios meses la diputada de Capira está en campaña para convencer a los convencionales de lograr una convención extraordinaria para así quitarle el partido a Roux. Atrás quedó esa foto del 21 de enero de 2018 donde los dos, manos arriba y en señal de victoria, celebran el haberle arrebatado CD a Ricardo Martinelli, su fundador. Era el torneo interno para renovar las estructuras de esa agrupación. En ese momento el expresidente de la República estaba preso en Miami, Estados Unidos, en espera de su extradición a Panamá por el caso de los pinchazos.
Ahora Ábrego se desliga de Roux para aliarse al PRD, partido cercano a sus afectos: ella es la esposa de Quibián Panay, sobrino de Pedro Miguel González, secretario general del PRD.
En el PRD, de acuerdo a fuentes de esa agrupación, ella también pacta con Benicio Robinson, presidente de ese partido, y el hombre que manda en la Asamblea. Su habilidad política para negociar traspasa al Legislativo. En el Ejecutivo también tendría una alianza con el vicepresidente de la República, José Gabriel Carrizo, quien tiene aspiraciones políticas para 2024. Concertar tras bastidores con la Presidencia es su estilo. En el quinquenio 2014-2019, cuando Juan Carlos Varela era el mandatario del país, y ella presidía la Asamblea, negociaban en secreto, mientras en público se mostraban como adversarios. Nombramientos, contratos, libretas de Lotería, becas, y otros favores, fueron parte de la moneda de cambio, de acuerdo con supuestas conversaciones del expresidente filtradas en el sitio Varelaleaks. El exdiputado José Luis Varela, incluso, reconoció en su momento que al no tener una mayoría en la Asamblea, afrontaron “situaciones de negociación para poder adelantar con la agenda de gobierno”.
¿Y Martinelli?
Pero, como en política nada está dicho y tampoco existen las casualidades, en este escenario también aparece el recién constituido partido Realizando Metas, que lidera Martinelli. ¿Ábrego y el expresidente se aliarían para la próxima campaña política? El que Sergio Chello Gálvez, alfil de Martinelli en la Asamblea, estuviera sentado al lado de esta diputada el pasado martes cuando reiteró su apoyo a Adames, manda un mensaje y alimenta la teoría de que todo podría suceder. Pero, con un Martinelli enredado en sus procesos judiciales, por el momento Ábrego se arropa con el PRD, desde donde los diputados que le apoyan pueden conseguir nombramientos, contratos, y puestos en las principales comisiones, como la de Presupuesto, a donde los ministros de Cortizo acuden periódicamente a solicitar traslados de partidas.
¿Habrá castigo?
La posibilidad de una revocatoria de mandato para los diputados aliados de CD, o de algún otro proceso disciplinario es remota. “Eso le corresponde a los entes del partido responsables por dichas medidas disciplinarias”, dijo Roux ayer a este medio. El exvicepresidente Arturo Vallarino, quien forma parte de la comisión de honor y disciplina de CD, y es convencional de este partido, recordó que el estatuto exige que el proceso de revocatoria esté reglamentado y en este momento no lo está. Por lo que, a su juicio, aquí no cabe la revocatoria. Recordó que a principios del quinquenio pasado, él defendió a diputados de CD que fueron procesados por no votar de acuerdo con la línea de la dirigencia, en esa época bajo el mando de Alma Cortés. De paso, Vallarino minimizó la pugna en CD alegando que es algo normal en todo partido democrático.
En tanto, los tres diputados de CD leales a Roux ya decidieron cómo votarán hoy. La diputada Ana Giselle Rosas adelantó que postularán a Rony Araúz a la presidencia, ella irá por la primera vicepresidencia, mientras que Edwin Zúñiga va por la segunda vicepresidencia.