La caída de los ingresos provocada por la crisis del nuevo coronavirus y las necesidades de fondos para atender la emergencia sanitaria y la crisis económica han generado nuevas necesidades de financiamiento y un ajuste en el presupuesto de gastos del Gobierno.
El ministro de Economía y Finanzas, Héctor Alexander, señaló a este diario que se están recortando $500 millones del presupuesto de funcionamiento y $1,500 millones de inversión para asignar partidas que refuercen la capacidad de respuesta sanitaria ante la emergencia y dotar de recursos al programa Panamá Solidario.
La reducción de los ingresos fiscales hará que este año el déficit fiscal supere ampliamente el objetivo de 2.75% marcado inicialmente en la Ley de Responsabilidad Social Fiscal.
El Ministerio de Economía y Finanzas explicará a la Asamblea Nacional y ante organismos internacionales y locales el nuevo punto de partida de las finanzas públicas, así como los planes para contener el déficit fiscal en el futuro.
El aumento del déficit tiene que ser financiado con la contratación de deuda. El Gobierno ya hizo una emisión de $2,500 millones, que habría sido suficiente para costear el presupuesto del año, pero la crisis obliga a buscar nuevas fuentes de financiamiento y se negocia con la banca multilateral.