El diario opositor La Prensa de Nicaragua anunció ayer que dejará de imprimirse, porque la aduana no le ha liberado el papel, justo cuando crecen las tensiones por detenciones a opositores en el país.
“La Prensa ha quedado sin papel para continuar circulando a nivel nacional debido a que la Dirección General de Aduanas [DGA] mantiene secuestrada en su almacén fiscal la materia prima propiedad de esta empresa”, denunció en primera plana el diario, único de circulación nacional.
Cuando faltan menos de tres meses para las elecciones, el gobierno ha ordenado la detención de 32 opositores, entre ellos, 7 posibles rivales del presidente Daniel Ortega, quien se postulará para un cuarto mandato consecutivo el 7 de noviembre. Los acusa de traición a la patria y de promover sanciones contra el país.
Entre los detenidos está la precandidata presidencial Cristiana Chamorro, bajo arresto domiciliario desde el pasado 2 de junio, y su hermano, el exdiputado Pedro Joaquín Chamorro Barrios, apresado el 26 de junio. En tanto, el periodista y director del diario Confidencial, Carlos Fernando Chamorro, hermano de los dos detenidos, tuvo que exiliarse el 22 de junio ante las presiones a su familia. Los tres son hijos de Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, el director de La Prensa asesinado 1978, y de la expresidenta Violeta Barrios.
La edición impresa de La Prensa saldrá de circulación a partir de este viernes, y seguirá en su versión digital.
No es la primera vez que la DGA retrasa la liberación de papel, tinta, equipos y otros materiales que el diario necesita para imprimir sus ediciones. Ya ocurrió entre septiembre de 2018 y febrero de 2020, con la retención por parte de la Aduana de 92 toneladas de materiales.
“Estamos suspendiendo momentáneamente” la circulación impresa, “pero La Prensa sigue en las plataformas digitales, seguimos haciendo nuestro trabajo de informar, de ser la voz de los que no tienen voz”, indicó el secretario de la junta directiva del diario, Juan Hollman, a un medio radial.
La DGA exige el pago de impuestos para liberar los materiales al rotativo, pese a que la Constitución establece que la importación de insumos para medios de comunicación están exentos de impuestos.
Según datos del gremio empresarial, al menos 20 medios de comunicación independientes han desaparecido por confiscaciones o cierres forzosos durante el gobierno de Ortega, en el poder desde 2007.