Lograr una tasa de positividad que esté por debajo del 10% en las pruebas diagnósticas de la Covid-19 es un reto para las autoridades sanitarias de Panamá, porque en las últimas siete semanas no ha bajado del 30%.
Así se desprende de los informes epidemiológicos del Ministerio de Salud (Minsa) que detallan que la pasada semana (26 de julio al 1 de agosto) hubo una tasa de positividad de nuevos casos de 32.70%; y la semana anterior (19 al 25 de julio) fue de 32.46% (ver tabla).
La diferencia entre las dos últimas semanas es que la que finalizó el sábado pasado se realizaron 22 mil 996 pruebas, de las cuales 7 mil 519 resultaron positivas; y en la semana previa se efectuaron 20 mil 339, para un total de 6 mil 603 casos.
Jean Paul Carrera, epidemiólogo y virólogo del Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud (Icges), explicó que la situación obedece a que hay una “meseta” de transmisión constante.
Añadió que tener esos altos porcentajes de positividad en las pruebas origina un escenario de transmisión que se mantiene en el tiempo. “Se ha logrado mitigar en cierta forma la situación, pero el país no ha alcanzado la supresión del virus”, expresó Carrera.
Los datos del Minsa también muestran que los días con más alta positividad de pruebas por la enfermedad Covid-19 fueron el pasado 12 de julio –cuando marcó 42.9% en función de 3 mil 590 pruebas efectuadas–, y el 1 de junio, cuando se reportó un 41.3%, pero solo se hicieron 905 pruebas.
El pasado lunes, el porcentaje de positividad se ubicó en 37%, con 2 mil 683 pruebas realizadas, para un total de mil 3 casos nuevos.
El infectólogo y exdirector del Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud (Icges), Néstor Sosa, expresó que estos números indican una transmisión comunitaria, y aún no se ve una disminución en el número de nuevos casos por día.
Sostuvo que controlar la transmisión comunitaria generalizada de la Covid-19 requiere medidas generales (evitar aglomeraciones, cierre de escuelas, higiene, quedarse en casa, uso de mascarilla, entre otras) y especificas (detección rápida de infectados, búsqueda de contactos, aislamiento y cuarentena) a niveles casi perfectos.
Además, dijo, una posibilidad es concentrar las medidas en las áreas de mayor circulación del virus, pero es difícil hacer cercos epidemiológicos en las áreas más afectadas, como hicieron en Italia y se está realizando en comunidades de Cataluña (España), porque se requiere mucha coordinación y recursos.
En la última semana epidemiológica el país reportó 7 mil 519 casos, lo que representa 910 casos más que la semana epidemiológica anterior (19 al 25 de julio) cuando 6 mil 603 personas se contagiaron de Covid-19, enfermedad que transmite el virus SARS-CoV-2.