La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, es objeto de enorme presión política para que la Unión acelere el lento y accidentado ritmo de sus campañas de vacunación contra la Covid-19 .
La Comisión invirtió más de 3 mil 300 millones de dólares en contratos con varios laboratorios para reservar 2 mil 300 millones de dosis de vacunas, pero apenas tres han sido aprobadas y las tres tiene retrasos en las entregas. Son las vacunas del dúo Pfizer/BioNTech, la de Moderna y la de la firma AstraZeneca.
A pesar de los tropiezos, Von der Layen y la Comisión mantienen la meta de vacunar al 70% de la población adulta hasta agosto.
Para ello, la Comisión decidió jugar fuerte ante el anuncio de AstraZeneca sobre retrasos en las entregas y consiguió del laboratorio la promesa de aumentar su capacidad. En total, se comprometió con la UE para 400 millones de dosis.
Pfizer/BioNTech, grupo al que la UE reservó 600 millones de dosis, prometió volver a la normalidad a mediados de febrero, mientras que Moderna se comprometió con la UE con 160 millones de dosis.