La ciudad de Guayaquil, en Ecuador, se ha convertido en un ejemplo para el mundo en materia de contención de la pandemia del coronavirus SARS-CoV-2.
Esta región llegó a tener 700 muertos en un día, cuando el promedio antes de la pandemia era de 38 diarios. Luego de controlar el virus su experiencia se puede resumir en una sola palabra: unión.
Durante un conversatorio organizado por la Fundación Ciudad del Saber, el ministro de Salud de Ecuador, Juan Carlos Zevallos, dio a conocer algunas lecciones aprendidas para frenar los contagios y los muertos.
En ese contexto, subrayó que recibieron apoyo de organismos internacionales, entre estos el Centro de Control de Enfermedades de Atlanta, en Estados Unidos.
Otra parte de la estrategia tuvo que ver con el trabajo mancomunado entre las alcaldías y la empresa privada, la activación del sistema primario de salud del país, y la telemedicina, para lo cual capacitaron personal de 38 hospitales.
La alcaldesa de Guayaquil, Cynthia Viteri, expresó que el 6 de abril, cuando alcanzaron el pico de muertes, hubo 700 decesos por encima de las 38 que fallecen en tiempos normales por diferentes causas. Detalló que luego de la intervención conjunta para controlar el virus, en 34 días lograron disminuir a cero las defunciones por encima del promedio habitual. Ahora mismo llevan 67 días en estas condiciones.
Durante el conversatorio también se refirieron a la situación de Panama. Juan David Morgan, presidente de la junta directiva de la Fundación Ciudad del Saber, destacó la participación del sector privado en la lucha contra el virus.
De acuerdo con Morgan, en el caso de Panamá, en los cinco meses de pandemia la situación ha empeorado, lo que obliga a ver qué dentro de las buenas experiencias, como la de Guayaquil, se puede replicar; y resaltó de esa nación la unión entre gobernantes y gobernados para vencer la pandemia.
En abril, Guayaquil fue el epicentro de la pandemia en América.