La vacuna desarrollada por AstraZeneca y la Universidad de Oxford contra la Covid-19 dio un gran paso en su camino a ser un antídoto contra el agresivo virus.
El pasado 29 de enero, la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) dio luz verde al uso de la vacuna, y ahora expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) dieron aval para que pueda emplearse en mayores de 65 años y en lugares donde circulen las variantes del virus.
Como se recordará, países europeos decidieron no inocular a las personas mayores de 65 años contra la Covid-19 con esta vacuna argumentando que la información sobre la eficacia de la vacuna en la población por encima de esa edad es insuficiente.
No obstante, los especialistas del organismo internacional denominados Grupo de Expertos en Asesoramiento Estratégico sobre Inmunización (SAGE) plantearon ayer que “tomando en cuenta todas las pruebas disponibles, la OMS recomienda el uso de la vacuna en personas de 65 años y más”.
Añadieron que la vacuna también puede utilizarse en lugares donde “estén presentes las variantes”.
El infectólogo Javier Nieto subrayó que esta es una vacuna que en su fase 1 y 2 de prueba posee información amplia en la población de adultos mayores. “Tal vez lo que se criticaba es que en los estudios de su fase 3 la muestra de esa población era reducida”, acotó.
Para Nieto en este caso el proceder de la OMS está alineado con el de la EMA, que tomó en cuenta los estudios de la fase 1 y 2 de la vacuna.
Esta vacuna está en el grupo de las dosis que deben llegar en los próximos días al país —a través del mecanismo Covax—, para seguir con el plan nacional de vacunación, que está dividido en cuatro fases y que busca inocular a 4.3 millones de personas.
De hecho, la Dirección Farmacia y Drogas del Ministerio de Salud informó que tras revisar el dossier de la vacuna concluyeron que cumple con los requerimientos para su aplicación.