El Clan Úsuga, cuyo cabecilla Dairo Úsuga fue detenido en Colombia el pasado 23 de octubre, es uno de los carteles de la droga con mayor influencia en el área de Costa Arriba y Costa Abajo de Colón, en donde se calcula que el 90% de la droga decomisada en esos sectores pertenece a esta poderosa organización criminal.
El procurador general de la Nación encargado, Javier Caraballo, dijo que recientemente se ha establecido que pandillas locales dan apoyo y facilidades logísticas a esta red criminal para descargar droga en el área de Colón y Veraguas y luego enviarla a los Estados Unidos.
Caraballo reveló que se ha establecido una estrategia conjunta a nivel regional (Colombia, Panamá y Costa Rica) para debilitar su estructuras.
Según reportes de inteligencia, el Clan Úsuga también está relacionado con la introducción de drogas en contenedores a través de puertos ubicados en la provincia de Colón.
Las investigaciones apuntan a que este grupo recluta empleados de empresas y funcionarios portuarios para facilitar la introducción de drogas en los contenedores.
Una de las pandillas locales es Kill The Nasty, que opera en la provincia de Colón y cuyo cabecilla, Moisés Murillo Barberena, está detenido en el penal de Punta Coco, en la Isla del Rey en el pacífico, se vincula al Clan Úsuga.
Según las autoridad Kill The Nasty dejó de ser una pandilla para convertirse en una organización criminal ligada al clan Úsuga.
Murillo fue detenido tras la Operación Omega, en la que se capturaron cuatro toneladas de droga. En ese operativo se descubrió que la droga llegaba a Panamá a través de los puertos de Manzanillo, Cristóbal (en el Atlántico) y Balboa (en el Pacífico). De allí eran enviados a México.
La presencia de este grupo en Panamá quedó evidenciada en 2016 cuando en Chepo fue arrestado Alejandro Quintero Otalvaro, alias El Paisa. Este mantenía orden de arresto de Interpol por delitos de narcotráfico y homicidio.
Quintero fue extraditado a Colombia y en mayo de ese año fueron detenidos otros dos miembros de esa red criminal con 94 kilos de drogas en Chame. David Santiago Patiño Arango y Javier Esteban Vélez Hernández eran parte de una estructura que introducía droga por esa región.
Las investigaciones revelaron que los dos colombianos detenidos pretendían poner en operación un pequeño laboratorio para diluir la droga, ya que en la residencia que ocupaban, ubicada en Bejuco, en el Distrito de Chame, fueron ubicados sustancias químicas como ácido sulfúrico, ácido muriático, alcohol industrial, potasa líquida y carbón activado posiblemente para diluir la droga y mezclarla con otras sustancias para sacarlas del país.
Otros tres miembros de esa organización criminal fueron detenidos en junio de 2017 en la operación Asturias en la que se decomisaron cinco toneladas de droga. En esta operación también se detuvo a cinco policías y un exfuncionario del Ministerio Público que colaboraban con dicho grupo.
Luego, en marzo de 2018 en un operativo realizado por autoridades de Colombia y Panamá fue capturado en Colón Apzalon Palacios Algumedo, alias Señor Palacios, quien es el supuesto cabecilla de una red de tráfico de cocaína, ligado al Clan del Golfo.
DECOMISOS
Durante el presente año las autoridades han decomisado 105 toneladas de drogas, en operaciones realizadas en tierra y mar. Esta cifra constituye un récord en incautaciones de droga en los últimos años. También se han incautado de autos, propiedades y dinero en efectivo propiedades. En la Asamblea Nacional se presentó un proyecto de Ley de extinción de dominio para atacar los bienes ilícitos, que espera su discusión en primer debate
Palacios Algumedo mantenía una alerta roja de Interpol relacionada con el tráfico de drogas. En octubre del 2018, el Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), en conjunto con la policía colombiana, se incautaron de un helicóptero y 200 kilos de cocaína de este grupo criminal.
El helicóptero fue ubicado en el poblado colombiano de Acandí, fronterizo con Panamá.
Según los reportes de Senafront, el helicóptero realizaba constantes vuelos en el área fronteriza transportando droga, hasta que, en una operación conjunta, se logró interceptar la aeronave.
Senafront y la policía colombiana mantienen un puesto fronterizo binacional en Alto Limón, en donde se realizan patrullajes para evitar el tráfico de drogas.
Igualmente, en Panamá opera desde el 11 de febrero de 2021 el Centro Regional de Operaciones Aeronavales (Croan), con el apoyo de Estado Unidos.
Informes de inteligencia revelan que el grupo criminal tiene presencia en el municipio colombiano de Necoclí, también fronterizo con Panamá y que desde es región se coordina el trasiego de droga por mar y a través de la selva. Esa área ha estado en primer plano en los últimos meses porque ese allí que se concentran miles de migrantes que quieren entrar a Panamá a través del tapón del Darién.
En 2020 fue detenido y extraditado a Estados Unidos Manuel Rentería Lemus, miembro del Clan Úsuga y presunto responsable de la recepción de la droga en la Costa Arriba, Colón.
En febrero del 2020 el Servicio Nacional Aeronaval (Senan) se incautó de un sumergible que transportaba cinco toneladas de cocaína,
La droga, perteneciente a esta red criminal, tenía como destino Estados Unidos.
Las autoridades han señalado que el uso de sumergibles es una de las técnicas más usadas por el Clan Úsuga para movilizar grandes cargamentos de drogas.
Según el Ministerio Público Otoniel tiene 120 órdenes de captura en Colombia y Estados Unidos, lo hace responsable de la introducción de al menos 75 toneladas de cocaína en ese país.
Y su captura en Colombia es calificada como uno de los más importantes golpes dados a los carteles de la droga en los últimos años. Y se estima que el 80% de la droga producida por esta organización criminal hace tránsito por las costas de Panamá, además de usar sus puertos como punto de embarque de parte de su droga.