La Policía de Nicaragua dijo ayer que no permitirá manifestaciones que no cuenten con su autorización, en vísperas de la primera marcha opositora convocada por la recién creada Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB).
A través de un comunicado, la Policía indicó que no permitirá “movilizaciones en la vía pública que no cuenten con el debido permiso” y que “tomará todas las medidas necesarias para mantener la seguridad [y] el orden público”.
“La Policía Nacional ratifica que ninguna actividad puede realizarse sin la correspondiente autorización y cobertura policial a fin de no afectar la vida social, económica, comercial, financiera, religiosa y de recreación del pueblo nicaragüense”, agregó el texto.
El pasado 4 de octubre, al anunciarse el lanzamiento de la UNAB, una coalición opositora conformada por decenas de organizaciones sociales y políticas de Nicaragua, sus integrantes expresaron que no solicitarían “permisos” ante la Policía, pues la Constitución del país les otorgaba el derecho a la “libre movilización de ciudadanos por el territorio nacional”. Ayer, un día antes de la marcha nacional convocada por la UNAB en contra del presidente Daniel Ortega y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, la Policía desplegó a centenares de antimotines sobre algunas avenidas de Managua, donde están previstas manifestaciones progubernamentales.
El conflicto en Nicaragua comenzó hace casi seis meses y ha dejado hasta 512 personas muertas, según oenegés de derechos humanos.

