Desde hacinamiento hasta posibles irregularidades en la toma de la prueba Covid-19, son las primeras impresiones de los viajeros que tuvieron que obligatoriamente tomarse la muestra en el aeropuerto de Tocumen para ingresar al país desde octubre pasado, al carecer de una prueba negativa vigente de Covid-19.
Cuando se dio la apertura del Aeropuerto Internacional de Tocumen (Aitsa), el 12 de octubre, este medio solicitó información sobre la condición de estos viajeros, así como la empresa proveedora de los kit de prueba y los laboratorios que las estaban realizando. La respuesta –tras la insistencia de este medio– llegó días después: “Clinilab Panamá, Medimed [sic] y Lasso”. Aitsa no mencionó a Jers Medical Panama, Inc. como una de las empresas contratadas por Aitsa para estos fines (ver facsímil).
Los laboratorios mencionados fueron descritos por Aitsa como de “gran trayectoria y prestigio nacional”. Sin embargo, los viajeros tuvieron otra versión. Entrevistados por La Prensa, coincidieron en el nombre de la clínica que les había aplicado las pruebas y la empresa que hacía el cobro de las pruebas eran Clinilab Panamá y Jers Medical Panama, Inc., respectivamente.
Clinilab, sin respuestas
El 19 de noviembre pasado, luego de obtener varios testimonios de viajeros que narraron su incómoda experiencia en el aeropuerto, La Prensa se comunicó con Clinilab Panamá para entrevistar al presidente y representante legal de esa sociedad, David Román. Su asistente –como se identificó– indicó que el medio debía enviar su solicitud de información al correo: administración@clinilabpanama.com. Así se se hizo (ver facsímil).
Este medio insistió telefónicamente y a través de correos a fin de obtener una respuesta antes de la publicación. No hubo respuesta. No obstante, un comunicado pagado de Clinilab Panamá asegura falsamente que La Prensa no los localizó para obtener su versión, pese a tener en su poder –y sin responder– el cuestionario que solicitaron a este medio.
El comunicado también afirma que “nuestra empresa inicia su desarrollo al inicio del 2019 y se constituye en agosto del mismo año”, de esta forma admite que Clinilab Panamá es una sociedad recién creada, 14 de agosto de 2019, tal como informó este medio.
La Prensa intentó conocer su experiencia con pruebas especializadas, requisito que le permitió recibir una concesión directa de Aitsa. También se preguntó –entre otras cosas– sobre la proveedora de las pruebas PCR que estaban aplicando a los pasajeros, pero, como se dijo, Clinilab Panamá no respondió.
Clinilab también afirma en su comunicado que desistió de pertenecer al consorcio Pty Covid Free –contratada por Aitsa para brindar el servicio de las pruebas Covid-19 a los viajeros– el pasado 30 de octubre y que “nosotros, desde hace más de un mes y 23 días, no tenemos ningún tipo de inherencia con el aeropuerto” ni con el consorcio. El desistimiento –añadió– lo hizo “público en redes sociales” en la fecha antes mencionada.
En tanto, los pasajeros contactados por La Prensa reiteraron que fue Clinilab la responsable de las pruebas Covid aplicadas a ellos. “En el viaje anterior, el que me atendió me dijo que era de Clinilab y me dejó hasta tomar una foto de su celular con el nombre de la empresa... [Pero] primero pagué a Jers Medical”, dijo el viajero.
¿Cuándo se hizo esa prueba? preguntó La Prensa. “El 2 de noviembre”, respondió.
Otros viajeros consultados mencionaron fechas como 18, 20 y 25 de noviembre, es decir, todos señalaron fechas posteriores a las que dice Clinilab que no operaba en Tocumen.
Clinilab Panamá menciona que “no hemos solicitado ningún permiso [al Instituto Gorgas] para poder practicar pruebas PCR”. El Instituto Gorgas confirmó a este medio los nombres de las empresas a las que expidió registro sanitario de reactivos para la detección de Sars-CoV-2. En ese listado se menciona a Clinilab con un “kit de prueba combinada de anticuerpos (Igm/IgG) de la enfermedad del coronavirus 2019”, con vigencia hasta el 1 de diciembre pasado.
Aitsa, sin rectificar
Del 21 de octubre al 27 de noviembre pasado, fechas en las que La Prensa preguntó a Aitsa por los laboratorios, cuyos nombres proporcionó el propio aeropuerto: Clinilab, Medimed [sic] y Lasso. Aitsa se mantuvo en el listado de tres y no hubo rectificaciones de su parte en estos nombres o que no estuvieran operando en la terminal.
La Prensa preguntó a Aitsa sobre la participación de Jers Medical, ya que inicialmente Aitsa no la mencionó , pese a que estaba realizando el cobro de $50 a los viajeros por las pruebas de Covid-19. Aitsa respondió que Jers Medical era uno “de los 4 laboratorios” que estaban operando en esa terminal.
La Prensa repreguntó si Jers Medical era el cuarto laboratorio, y Aitsa respondió que sí, que formaba parte del consorcio Pty Covid Free, junto a Minimed, Corp., VMA Laboratorios, S.A., HMG Investment, Corp., Ayac Laboratorios Panamá, S.A. y Phoenix Farmacéutica Panamá, S.A.
Debido a ello, este medio investigó todas las empresas mencionadas por Aitsa y las intentó localizar, en especial para preguntar sobre el criterio de selección: “experiencia de haber realizado 1,000 pruebas de hisopados antígeno para la detención del Covid- 19”.
Se desconoce cómo estos laboratorios demostraron tal requisito, ya que el Ministerio de Salud guarda silencio sobre esta concesión que entregó Aitsa.
Jers Medical Panama
Los nombres de los laboratorios que realizan las pruebas en el aeropuerto y las empresas que mantienen la concesión fueron proporcionadas y reconfirmadas por Aitsa. Sin embargo, el presidente de Jers Medical Panama, Darío Martínez, considera un error de este medio mencionar “Medimed” y no Minimed, que es la empresa que forma parte de su consorcio Pty Covid Free.
Cuando La Prensa preguntó a Martínez, en noviembre pasado, por qué estaba cobrando por las pruebas y cuál era su relación con los laboratorios Medimed [sic], Lasso y Clinilab, aseguró que ninguna. Tampoco hizo referencia a que el nombre de Minimed estaba mal escrito (por Aitsa), y que al principio mantuvo una relación comercial con Clinilab para hacer las pruebas en la terminal aérea.
Su respuesta y el listado de nombres de empresas que conforman el consorcio que fue proporcionado por Martínez, fue colocado en las publicaciones de este medio, tal como los entregó.
En cuanto a la calificación de Jers Medical dentro del lista de “laboratorios” que se encuentran en el aeropuerto, tal afirmación es de Aitsa, y no de La Prensa.
Otras transacciones
El pasado 21 de diciembre, La Prensa preguntó a Martínez si estaba al día con los pagos a la Caja de Seguro Social (CSS), debido a que el nombre de empresa figura en una lista de morosos de la institución en los años 2016 y 2018 (ver facsímil en la versión digital de esta noticia en prensa.com). Martínez lo negó. “En ningún momento incumplió con sus obligaciones ante la CSS. Ni entre 2016 a 2018, ni nunca en todos sus años operando en la República de Panamá”.
Adjuntos
Empleadores morosos.pdfLa Prensa también preguntó por qué fue removido del cargo el hoy exrepresentante legal de Jers Medical Orlando Vanegas Ortiz, imputado en irregularidades en pasadas contrataciones públicas.
Aseguró que fue reemplazado por “temas operativos a los pocos meses [de conformarse la sociedad]”, y desde ese entonces él [Martínez] es el representante de Jers Medical. Indicó que el bufete legal Alves & Co. que constituyó la sociedad, le proporcionó los directores, entre ellos Vanegas Ortiz, cuyo nombre es el que aparece como representante de Jers Medical en las mencionadas listas de morosos de la CSS.
También se le preguntó a Martínez por un préstamo por $12 millones que solicitó a la Caja de Ahorros para la compra de materia prima para operaciones comerciales. ¿El préstamo se vincula con sus operaciones en el aeropuerto? Dijo que no.
Inconsistencias
Aitsa afirmó el pasado 23 de diciembre que su junta directiva “autorizó”, mediante resolución No. 130-JD-20 del 5 de octubre pasado, la contratación directa del consorcio Pty Covid Free, algo que no tiente sentido por las siguientes razones que dio el propio presidente de Jers Medical:
Martínez afirmó a este medio que Jers Panamá empezó a operar en el aeropuerto el día de la reapertura de la terminal, es decir, el 12 de octubre pasado. Aclaró que empezaron sin tener una concesión ya que el consorcio se constituyó después que empezaron a operar.
Para el 5 de ocubre pasadado, cuando la directiva de Aitsa autorizó la contratación del consorcio, este legalmente no existía. De hecho, Martínez dijo a La Prensa que el trámite para constituir jurídicamente el consorcio comenzó a realizarse en el Registro Público en la segunda mitad del pasado mes octubre.
Aitsa, en su comunicado, alega que hizo modificaciones al tema de la confidencialidad de la información que está en su poder para “ampliar su alcance”. La confidencialidad fue usada como excusa por Aitsa para negar la entrega a La Prensa de información sobre estas contrataciones.
También se refirió a las recientes modificaciones a su tarifiario de alquiler, en el que incluyó un nuevo rubro: “Clínica de atención y servicios médicos al pasajero”. Según Aitsa, el cambio no está relacionado con la operación de los laboratorios en esa terminal.