El presidente Donald Trump comenzó ayer su último día de campaña desestimando en un mitin las encuestas que lo muestran rezagado –44% contra 51%– respecto a su rival Joe Biden. Trump urgió a los electores a terminar con el “caos” en Estados Unidos (EU) en la víspera de unos comicios marcados por la crispación.
“Veo esas encuestas falsas”, afirmó. “Vamos a ganar igualmente”, añadió, ante una multitud que gritaba en coro “¡Cuatro años más!”.
Trump se vanaglorió de ser un presidente que no forma parte de la clase política y por eso “pone a EU primero”.
“Salgan y voten, eso es lo único que les pido”, dijo el magnate inmobiliario que luego reprodujo ante la concurrencia una serie de lapsus y de errores que ha cometido Biden durante la campaña.
El mandatario, que fue hospitalizado tras contraer la Covid-19, fue acusado por Biden de “propagar” el virus con su ritmo frenético de mítines, que aglomeraron mucha gente, a veces sin mascarillas.
Biden criticó con fuerza la gestión de la pandemia ayer desde un mitin en otro estado clave: Ohio. “¡Tuvimos suficiente con el caos! Tuvimos suficiente con los tuits, la ira, el odio, el fracaso, la irresponsabilidad”, afirmó Biden, quien se comprometió a tener la pandemia de coronavirus “bajo control” si es elegido.
Para llegar a la Casa Blanca hay que obtener, al menos, 270 votos en el Colegio Electoral, de 538 integrantes. Y en muchos de los estados con peso en ese cuerpo que cambian sus preferencias partidarias en cada ciclo electoral, la diferencia entre ambos postulantes está dentro del margen de error.
El nerviosismo en torno a la elección llevó a varias ciudades, incluyendo Nueva York y Washington, a parapetar comercios y oficinas y tapiar ventanas ante eventuales disturbios.
Trump cerraría su campaña con un último mitin de vuelta en Michigan, en la localidad de Grand Rapids, el mismo sitio que eligió en 2016 para cerrar su campaña y donde dijo: “Si ganamos Michigan, vamos a ganar esta histórica elección”.
Cuatro años después, esta elección presidencial tiene sabor a un referéndum sobre la gestión de Trump.
Ayer, Biden también se presentaría en Pensilvania, que espera inclinar esta vez hacia el lado demócrata y finalmente entrar a la Casa Blanca, tras dos tentativas infructuosas.