¡Todos a las urnas!

Llegó el día más esperado de cada quinquenio. Siete candidatos presidenciales -cuatro de partidos políticos y tres por la libre postulación- se disputan el voto de 2.7 millones de electores, en un país cuyos niveles históricos de participación superan los de la región.

Si bien cada cinco años hay uno que otro cambio en las reglas del juego, en esta ocasión las reformas electorales marcaron con más fuerza el proceso: un período de campaña más corto; topes al financiamiento privado; y prohibición de la divulgación masiva de propaganda estatal.

Las autoridades electorales, que esperan una participación del 80% del electorado, líderes de la sociedad civil, iglesias y dirigentes políticos, coinciden en un solo llamado: ¡todos a votar!

Torneo, signado por el descrédito de la política y nuevas reglas del juego

Llegó la hora. Atrás quedaron 60 días de campaña donde 5 mil 865 candidatos recorrieron las calles panameñas en busca de respaldo para alcanzar un puesto de elección popular.

De acuerdo con estadísticas del Tribunal Electoral (TE), en la jornada de hoy están habilitados para votar 2 millones 757 mil 823 panameños en 2 mil 798 centros de votación, para escoger 861 cargos.

Sin embargo, el plato fuerte del día es la figura que podría reemplazar a Juan Carlos Varela en la Presidencia de la República. Siete candidatos se disputan el puesto en una contienda que ha estado marcada por una campaña ciudadana contra la reelección, y la preponderancia de la libre postulación como antídoto para derrotar el anquilosado sistema de partidos políticos, actualmente liderados por diputados de la Asamblea Nacional.

Para analistas políticos como Edwin Cabrera, por primera vez no se trata de una contienda antioposición, sino antisistema. Quizá por eso no fue raro que en sus discursos de cierre de campaña, la mayoría de los candidatos presidenciales se pusieran la camiseta de combate a la corrupción y contra las viejas prácticas políticas de siempre.

En sus planes de gobierno, todos proponen cambios a la Constitución, aunque algunos son más audaces que otros. José Isabel Blandón, del Partido Panameñista; Saúl Méndez, del Frente Amplio por la Democracia; y los candidatos por la libre postulación Ana Matilde Gómez y Ricardo Lombana, se inclinan por convocar a una constituyente, aunque a través de distintos métodos. Los otros: Laurentino Cortizo, del Partido Revolucionario (PRD); Rómulo Roux, de Cambio Democrático (CD); y Marco Ameglio, de libre postulación, proponen reformas.

El foco de estas elecciones también ha estado puesto sobre la poderosa Asamblea Nacional, cuyos diputados han manejado casi $200 millones en planillas ocultas y donaciones.

Por eso, la columna vertebral de la iniciativa ciudadana por la #noalareelección ha descansado sobre el Legislativo. La última encuesta de GAD3 para este diario (2 de mayo) reveló que el 66% de los panameños estaría dispuesto a no reelegir a los diputados.

Por primera vez

Estas elecciones también tienen una larga lista de primeras veces: la primera vez, después de la invasión de 1989, de la campaña más corta (60 días). La primera vez que la propaganda se costea con el financiamiento público. La primera vez que hay restricciones en el financiamiento privado.

La primera vez que los candidatos están obligados a divulgar la lista de sus donantes (15 días después del torneo), y la primera vez que se prohíbe la propaganda estatal tres meses antes de los comicios. Es la primera vez que los candidatos no participaron en la inauguración de obras en medio de la campaña, y es la primera vez que entra a regir la figura de la doble instancia: las controversias las ve un juzgado electoral, y si las partes no están conformes, pueden recurrir al pleno del TE, conformado por los tres magistrados.

Hoy

De las propias autoridades electorales se espera que hoy más del 80% de los ciudadanos salgan a votar en consecuencia, con el entusiasmo que siempre ha caracterizado a los panameños por participar en la principal fiesta democrática.