De cara a los comicios de mayo de 2024, coaliciones independientes y nuevos partidos políticos con discursos antisistema, anticorrupción, y de “nueva política”, entran al escenario. En los últimos días, dos eventos distintos se han tomado la agenda pública. La tarde del pasado martes 5 de abril, un grupo de jóvenes anunció la creación de la coalición Vamos, liderada por los diputados independientes Juan Diego Vásquez y Gabriel Silva. Dos días antes, el domingo 3, el Movimiento Otro Camino Panamá, partido político en formación que lidera el excandidato presidencial independiente Ricardo Lombana, celebró sus primeras elecciones internas para elegir a 313 líderes nacionales.
La vía independiente, con el auge que tuvo en los comicios de 2019, regresa con paso firme en momentos en que los partidos tradicionales viven una de sus etapas más críticas por la falta de credibilidad y confianza. Según la encuesta de Ciudadanía y Derechos 2021, publicada por el Centro Internacional de Estudios Políticos y Sociales (CIEPS), los partidos políticos son de las instituciones panameñas con menos credibilidad. Sólo el 24.2% de los encuestados los valoran de forma positiva.
“Hoy se escribe un nuevo capítulo en la historia de las candidaturas independientes en Panamá”, dijo Silva durante la presentación de la coalición en el Parque Urracá. Agregó que buscan personas “decentes, honradas, trabajadoras y preparadas” para postularse y formar parte de la coalición.
“Necesitamos tomarnos la Asamblea Nacional, necesitamos tomarnos los gobiernos locales y lo vamos a hacer en el 2024″, añadió. La actual Asamblea cuenta con una bancada independiente por primera vez en su historia. La conforman Vásquez, Silva, Edison Broce, Raúl Fernandez y Adan Bejerano. No se descarta que Broce, y Fernández, más adelante se unan a la coalición que promueven Silva y Vásquez.
A pocos meses de que se cumplan tres años de la administración de Laurentino Cortizo, los diputados independientes son las principales voces críticas del gobierno. La bancada independiente, con la marcada excepción de Bejerano, la mayoría de las veces, suele hacer oposición a las iniciativas de ley controversiales, mientras otras bancadas opositoras están divididas o apoyan a la aplanadora del Partido Revolucionario Democrático (PRD).
Cada tanto, Silva y Vásquez reciben el respaldo de la población que condena la corrupción y cuestiona la influencia del clientelismo en la actividad política nacional.
En prueba
El politólogo e investigador, Juan Diego Alvarado, explicó a La Prensa la importancia de los partidos políticos en la democracia panameña, para bien y para mal. “Son los bloques fundamentales, para bien y para mal”, dijo. En 2019, si bien las candidaturas por la libre postulación para la Presidencia de la República, generaron más apoyo que nunca, pues Lombana obtuvo el 18.8% de los votos totales, Alvarado explica que las candidaturas por la libre postulación siempre han sido una opción.
Sin embargo, el 2019 también evidenció los limitantes que tienen las candidaturas por la libre postulación para organizarse. Para Alvarado, este será uno de los principales retos de las candidaturas independientes, para lograr permear a otros sectores de la población, alejados de la ciudad capital, las áreas urbanas, y los círculos universitarios o académicos.
“Están creando una coalición para enfrentar la forma partidista, pero emulando las estrategias multinivel de cooperación y coordinación de candidaturas que tienen los partidos establecidos”, dijo Alvarado.
Aseguró que actualmente el modelo de candidaturas por la libre postulación se encuentra aún en etapa de prueba. Considera que las mismas pueden ser eficientes en servir como “válvulas de escape” para la falta de representatividad que ha creado el sistema partidista tradicional.
“Ambas (coalición Vamos y Otro Camino), son manifestaciones de la tensión que existe entre la desafección de las personas por los partidos y la articulación de una identidad política independiente con los imperativos estructurales que te fuerzan a organizarte para conseguir mejores resultados electorales”, concluyó Alvarado.
Otro Camino
La creación del partido político Movimiento Otro Camino Panamá ha generado críticas. Si bien Lombana recibió un apoyo histórico en las elecciones de 2019, pues capitalizó en el descontento que existía por el manejo de la cosa pública por parte de los partidos tradicionales, argumenta que creó el partido para competir “en igualdad de condiciones”. Incluso, en videos promocionales, detallan que un partido “es el vehículo más adecuado para establecer liderazgos democráticos en todo el país y para establecer los principios que nos unen”.
‘Fortaleza’
Mientras que la exvicealcaldesa del distrito capital y ex precandidata a la alcaldía de Panamá, por la libre postulación, Raisa Banfield, manifestó que estos movimientos son positivos pues ayudan a “diversificar la oferta electoral”. Considera que ayudará a los precandidatos el tener personas con quien aliarse durante el proceso de recolección de firmas. Durante su búsqueda de respaldo en 2018, recuenta encontrarse en el camino a otros precandidatos.
“Es una fortaleza al momento de buscar esa intención de voto del ciudadano”, dijo y agregó que también “es una forma de llegar unidos a los distintos espacios de poder político”. Banfield considera que la “coalición antisistema” es positiva y que el poder correr juntos les ayudará a lograr resultados positivos en las elecciones de 2024.
Por otro lado, resaltó la importancia de postular a candidatos a puestos de gobiernos locales, más allá de solo la Asamblea Nacional. “La ciudadanía entiende muy poco las responsabilidades de los gobiernos locales en materia de desarrollo humano, local y comunitario”, manifestó.
