Julia Gavarrete, periodista de investigación del diario digital salvadoreño El Faro, una de las víctimas de las presuntas interceptaciones con Pegasus, señaló que todo apuntaría a que el gobierno de Nayib Bukele sería el autor de las mismas.
“Estamos hablando de una treintena de periodistas que han sido infectados, no solo de El Faro. Esto, sumado a activistas que también dieron positivo a pinchazos, hay personas que han estado bajo una intervención continua. [Esta] el caso del periodista Carlos Martínez, que según los informes fue intervenido por 17 meses”, explicó Gavarrete.
Citando un informe elaborado por el laboratorio Citizen de la Universidad de Toronto, especializado en ciberseguridad, El Faro denunció que 22 miembros de su personal fueron intervenidos con Pegasus, de la empresa israelí NSO Group, 226 veces entre el 29 de junio de 2020 y el 23 de noviembre de 2021.
Gavarrete indicó que la sospecha inició por errores en el uso de las aplicaciones en el celular y por un correo de alerta recibido desde la empresa Apple.
El espionaje global y el uso del 'software' Pegasus en Panamá
Una publicación del The Washington Post y 16 medios asociados de julio de 2021 reveló que el software Pegasus, fabricado por la israelí NSO Group, se usó para vigilar más de 50 mil celulares de políticos, activistas y periodistas de diversos países del mundo. Según el reporte, la lista de espiados proporcionada por Forbidden Stories, una organización periodística sin fines de lucro con sede en París, y Amnistía Internacional, documentó espionajes desde 2016. En Panamá, sin embargo, Pegasus entró al país en 2012 y se usó hasta mayo de 2014, de acuerdo con información del Ministerio Público.
“Si hacemos un seguimiento a la línea del tiempo y hechos ocurridos, todos los hechos tienen que ver con el gobierno de Nayib Bukele, del que no hemos tenido respuesta luego de nuestras denuncias”, indicó.
Las intervenciones no solo son un ataque a los periodistas, sino también a las fuentes de información y a las familias de los profesionales, “ya que vulneran tu espacio, tu privacidad, esta es la realidad a la que nos enfrentamos, y por eso es importante seguir denunciando y no dejarlos pasar”, agregó.
El gobierno de Bukele niega estar relacionado con Pegasus. “Reitero que el gobierno de El Salvador no tiene los recursos ni las licencias para utilizar este tipo de software”, informó la secretaria de Comunicaciones, Sofía Medina, en un comunicado citado por AFP.
Washington, que ha impuesto sanciones a altos cargos salvadoreños, incluida la jefa de gabinete de Bukele, Martha Recinos De Bernal, “por corrupción”, estima, por el contrario, que El Salvador intenta acallar a las voces críticas.
“Nos oponemos a los esfuerzos para silenciar voces críticas. Libertad de Expresión y medios independientes son esenciales para cualquier democracia”, señaló Brian Nichols, subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental de Estados Unidos.
Las relaciones entre Estados Unidos y El Salvador son muy tirantes. AFP recordó que Washington cortó la ayuda a través de su agencia de cooperación USAID y la redireccionó a la sociedad civil para la lucha contra la corrupción, a lo que Bukele reaccionó estrechando lazos con China.

